Opinión

Una pregunta que sigue sin respuesta

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Después de un gran silencio por parte del Arzobispado de Pamplona y Tudela, en relación al traslado de un volumen importante de fondos parroquiales realizado el pasado 22 de Noviembre del año 2014, se dio a conocer el 23 de enero de 2015 un Decreto literal emitido por Don Francisco Pérez González, Arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela, fechado el 2 de junio de 2014, donde se modificaba un articulado del Estatuto de Archivos de la Diócesis de Navarra vigente para dar cobertura con esta nueva redacción al traslado de los fondos documentales realizado.

Tanto en el Decreto como en artículos relacionados se hace una especial referencia a la unidad, independencia e integridad, así como al fundamento archivístico llamado “principio de procedencia”, o incluso a instrucciones dadas por la Iglesia a nivel nacional o Vaticana, remontándose en el tiempo a 1929 y 1976. Ante toda esta erudición y mi modesto conocimiento, no dejo de preguntarme: ¿Por qué se cumple todo ello en Pamplona y no en Tudela?

Durante más de una década todos estos fondos parroquiales pertenecientes a las poblaciones riberas han permanecido independientes, íntegros, se ha respetado su principio de procedencia parroquial y, desde luego, en un archivo único ya que en las propias palabras Don Francisco Pérez es un archivo único, con dos sedes, Pamplona y Tudela.

Si el propósito es mantener en la sede de Tudela los fondos tanto catedralicio, como diocesano, como parroquiales pertenecientes a las Parroquias de Tudela, ¿por qué en estos momentos se plantea reducir el servicio en Tudela? ¿Por qué este alejamiento de los documentos a los propios feligreses de las parroquias de poblaciones muy cercanas a nuestra ciudad?

"Porqué este alejamiento de los documentos a los propios feligreses de las parroquias riberas"

¿Por qué dificultar la investigación local de sus fondos? ¿Por qué perder un servicio consolidado con la atención de personal técnico cualificado con dedicación exclusiva en Tudela?

¿No son nuestros fondos tan ricos y abundantes como para justificar la suspensión de un puesto de trabajo?

Desde hace más de dos meses sigo haciéndome estas preguntas y todavía no he obtenido una respuesta válida a ellas en las muchas lecturas dadas a estos textos.

Hay un elemento importante que no se cita en ellos, es el fundamento patrimonial. Este legado, en este caso documental, engrandece y ennoblece a la población que lo contiene. En este caso es nuestra ciudad de Tudela quien durante este tiempo ha sabido custodiarlo y atenderlo cumpliendo su función de capitalidad de la Ribera y en ningún momento ha escatimado ni regateado esfuerzos económicos para garantizar su preservación y consulta técnica y segura.

Beatriz Pérez Sánchez

Archivera Municipal