Opinión

Presupuestos del PP: más precariedad, más pobreza, más recortes y menos derechos

La propuesta antisocial de los Presupuestos Generales del Estado 2018, presentada por el  Ministro de Economía,  Cristóbal Montoro,  define y consolida las políticas de la austeridad y  recortes de derechos sociales, políticos y laborales que castigan brutalmente a la mayoría social y trabajadora de España y también de Navarra. 

Con estos presupuestos, el Partido Popular y Ciudadanos persisten en las políticas austericidas ante la pasividad del PSOE que le permite seguir gobernando al negarse a presentar una moción de censura.

Se trata de unos presupuestos hechos al dictado de las empresas del IBEX 35 y la oligarquía económica y financiera.

A pesar de que la producción económica ha alcanzado niveles previos a la crisis-estafa que comenzó en 2007 el gasto e inversión social que presenta este presupuesto sigue en niveles muy bajos. Es decir, el   resultado final de esta crisis ha sido una brutal transferencia de renta de las clases populares y trabajadoras al capital y oligarquía económica.  

Son unos presupuestos que en lugar de  tener como objetivo redistribuir la riqueza buscan aumentar aún más la distancia entre los que tienen más y explotan y los que tienen menos y son explotados. El gasto social sólo aumentará solo la mitad de que lo que crecerá la actividad económica.

Por eso decimos que el proyecto de presupuestos presentado por el PP para 2018 maltrata a millones de personas. 

Maltrata a los jóvenes precarizados, a las mujeres víctimas del machismo y la desigualdad, a la clase trabajadora empobrecida o a millones de pensionistas con pensiones de miseria.

Esto no sucede porque el PP sea perverso por naturaleza, sino porque su proyecto económico y social nada justo y digno puede ofrecer a las mayorías sociales precarizadas y empobrecidas de España y de Navarra. 

El PP está comprometido con la Constitución del 135 y del 155, con la Constitución que impone la precarización y pobreza como modelo social y que aplica el 155 como parte de un modelo cada vez más autoritario de Estado.

Este objetivo de modelo de sociedad y de modelo de Estado, compartido por la UE y el Ibex-35, se traduce después año tras año en presupuestos raquíticos para la educación y salud públicas, en pensiones de miseria para millones de personas, en que más de la mitad de las personas desempleadas carecen de prestación económica o también en que no haya ni un solo euro para sacar de las cunetas a los 100.000 demócratas asesinados por el fascismo que aún siguen en ellas.

Un modelo de sociedad y de Estado que supondrá también para 2018 que el presupuesto de Defensa crecerá más que el de educación y salud juntos o que siga bajando los impuestos a quienes más tienen y más ganan.

En estos presupuestos Navarra sigue siendo una CCAA castigada. Vamos a recibir un 28 % menos (56 millones de €) por parte del Estado que en el año 2017. Las únicas inversiones que financia son el recrecimiento de Yesa y el ruinoso Tren de Alta Velocidad. Más despilfarro, más cemento y más obra faraónica innecesaria.

Mientras el presupuesto para el Ministerio de Defensa ha aumentado un 11% el Ministerio de Educación aumenta su asignación en un 3% y el de Sanidad un 3,9%.

Las necesidades que tiene la mayoría social y trabajadora de España y de Navarra no son comprar más tanques o barcos de guerra, son más becas de estudio, más y mejor educación pública, más y mejor sanidad pública, más medios para erradicar las desigualdades, más y mejor protección ante las situaciones de necesidad, más y mejores pensiones, y más y mejor empleo, vivienda y derechos sociales y laborales. Y esto significa otra política fiscal progresiva y justa.

Como desde hace dos años se está haciendo en Navarra con el cambio que supusieron las elecciones de 2015. El aumento de progresividad y equidad fiscal en Navarra ha permitido financiar un aumento del 41% en el presupuesto de derechos sociales: renta garantizada, pensiones mínimas, vivienda social, dependencia… 

Todo lo contrario de lo que el PP está haciendo en España. Como sangrente ejemplo está también el hecho de que el recién anunciado pacto contra la violencia de género sólo tiene presupuestado 80 millones de los 200 acordados. 

Mientras tanto España continúa siendo un país que permite la evasión fiscal.  Intermón Oxfam ya nos ofreció los datos de 2017 en los que la transferencia de empresas españolas a paraísos fiscales aumentó un 20%. Con ese dinero (aprox. 23.000 millones de €), se podría desarrollar un plan integral de rescate social para aquellos que lo están pasando peor. 

Nos negamos a plantear los PGE como un mero acuerdo entre partidos para conseguir mantenerse en el poder o aumentar la inversión en un territorio. Nos estamos jugando que la precariedad y pobreza sean los ejes vertebradores de nuestro modelo de sociedad.

Por todo ello sabemos que solo hay una posición posible ante la política presupuestaria del PP: rechazarla y derrotarla, lo contrario equivale a ser cómplice y corresponsable del modelo de sociedad y de Estado, antisocial y autoritario, que el PP quiere imponer y consolidar en España y en Navarra.

Todos aquellos que no voten en contra de los presupuestos del PP y Ciudadanos y permitan aprobarlos serán coautores del destrozo social y político que el PP quiere imponer y consolidar. Si UPN y PNV apoyan o permiten su aprobación serán tan responsables como PP y Ciudadanos de sus consecuencias.

En Izquierda-Ezkerra tenemos muy claro lo que haremos, votar No a los presupuestos del PP y luchar en la calle y en las instituciones para derrotarlos.

Iñaki Bernal Lumbreras, Senador de IE
José Miguel Nuin Moreno, parlamentario de IE
Marisa De Simón Caballero, coordinadora de IUN y parlamentaria de IE