Por segunda vez este año, tuvimos la dicha de ver en el Teatro Gaztambide el sainete escrito por Luis González Cruz “Jabonero”: Beethoven Latitud 2.5.0.
La primera fue una sorpresa muy agradable, el sábado 22/10/ 2022 fue mucho más. Una puesta en escena ágil, compacta, sin duda más ensayada. Pero sobre todo más emotiva.
El público expectante y sensible hasta el llanto. En su día comente del gran paso adelante que suponía esta obra en su carrera artística para Luis, y del esfuerzo y actitud de colaboración de todos los componentes, con Marta físicamente presente.
Ahora me gustaría centrarme en esta tercera representación y en las emociones sin Marta. Corporalmente no estaba, pero su espíritu lleno el Gaztambide. Las primeras miradas al abrirse el telón fueron dirigidas a Belén, la violinista que interpreto su difícil papel muy dignamente. Prontamente la aparición de Luis en el escenario fue clamorosamente aplaudida con los espectadores en pie. Durante el espectáculo nos divertimos y pasamos un rato extraordinario disfrutando de todos los artistas y ocurrencias del guión.
Pero sin duda el momento estelar emocional y culmen de la noche tras el fragmento de la Oda a la alegría con el magnífico arreglo para músicos y coro, fue cuando en la pantalla al fondo del escenario, se mostraron fotografías y videos de Marta; fresca, alegre, sonriente… viva. Entonces la ovación más grande, más larga, más fuerte retronó en el ambiente como nunca en la vida de ese teatro.
Gracias Luis y Merche por cumplir vuestro compromiso valiente y difícil con Marta al repetir la actuación. Gracias a todos los componentes de la misma por vuestra responsabilidad y buen hacer. Pero sobre todo gracias a ti Marta, por forjar que esto sucediera.