Opinión

¡Busquemos la esencia!

No sé si les pasa lo mismo, pero siento que el tiempo transcurre demasiado rápido. Según los griegos existía Kronos, el Dios del tiempo como lo conocemos; pero también estaba Kairos, un tiempo cualitativo que puede ser el que algunos percibimos, más acelerado y nada lineal.  Sea cual sea, hace “poco” me encontraba escribiendo un artículo para felicitarles la Navidad y de nuevo me veo en la misma situación. 

Es cierto que el tiempo ha pasado muy rápido, aunque no carente de acontecimientos que a lo largo de este año se han ido sucediendo. Acontecimientos sucesivos que en ocasiones casi no podemos digerir ni reflexionar; algo que me parece fundamental, más si cabe en un momento en el que a veces dudo si no nos encontramos inmersos en la conocida “Alegoría de la caverna” de Platón. 

Pienso que vienen momentos “únicos” en los que independientemente de lo que suceda a nuestro alrededor será importante mirar hacia dentro y descubrir la verdadera esencia. Al hilo me viene a la cabeza la expresión de sorpresa de algunos visitantes cuando descubren “nuestra joya patrimonial”, “nuestra Catedral”. “Desde fuera parece pequeña, y hasta oscura” comentan, pero cuando acceden al interior se dan cuenta de la verdadera naturaleza, de su magnitud, de su luminosidad, de la verdadera energía del templo.  Pues eso… lo dicho, busquemos la verdadera esencia en el interior. 

¡Feliz Navidad y próspero Año Nuevo 2023!