Las Navidades de los otros en la pandemia de Covid

Las próximas fiestas de Navidad en Tudela serán para muchos unas fiestas más alicaídas con menos luces, cabalgatas, cotillones, comidas y todo lo que sería una disminución del consumo. Pero, para nuestra salud psicológica, deberíamos pensar siempre más en lo que tenemos, y no en lo que nos falta. Confiemos y si, por ahora, no podemos visitar como deseamos a nuestros mayores, podemos hacer otras cosas: videoconferencias, decorar la casa con motivos navideños que les encantan a los niños,
hacer el belén y adornar el árbol, cantar villancicos, poner alegría y calor en todos, etc. 

Pensemos así, y también en los hogares cercanos que tendrán a sus miembros en paro, sin poder escapar de la pobreza, que acudirán a bancos de alimentos y a los que las limitaciones antes señaladas les parecerían superfluas. Que muchas veces, estos conflictos económicos para llegar a fin de mes, incrementarán problemas de salud mental, ansiedad y depresión, y que quizá, con gestos como comprando las ventas navideñas en los pequeños comercios, pudiéramos ayudarlos a que no cerrasen. 

También la Navidad es acordarnos de los que son más desfavorecidos que nosotros.