Opinión

Podemos & Bildu

Podemos es una fuerza emergente pero no tan determinante. Es una de las conclusiones que se podrían extraer de los resultados de las pasadas elecciones autonómicas en Andalucía. Muchos analistas políticos interpretan que el apoyo obtenido por Podemos, en torno a un 15 por ciento de los votos, es un síntoma de que su efecto está empezando a contenerse, incluso a desinflarse. Si extrapolamos dicho porcentaje a Navarra, y teniendo en cuenta los resultados de las elecciones forales de 2011, con ese respaldo estaríamos hablando de que este partido obtiene entre 8 y 9 escaños, porque esa es la traslación a escaños de los partidos que obtuvieron un porcentaje de votos similar.

Está claro que Navarra no es Andalucía, y que a algunos el ejercicio planteado les parecerá carente del más mínimo rigor, pero todo apunta a que para hacer realidad el tan cacareado soflama del cambio que pregonan partidos como Podemos, será necesario que éste se una a todos los demás para arrebatar el gobierno a UPN.  Y para eso, Podemos no ha disimulado públicamente su apuesta para llegar a un acuerdo con Euskal Herria Bildu (EH Bildu), formación que, como todos sabemos, es abiertamente partidaria de romper con España y de que Navarra se integre en su ensoñada nación vasca. Muy al contrario, Podemos ha sido bastante elocuente. Y EH Bildu ha cogido el guante. No obstante, el independentismo vasco lleva 30 años valiéndose de cualquier medio para desalojar a UPN de las instituciones.

"A tiempo estamos de reflexionar"

 

Sin embargo, hasta el momento, todo habían sido declaraciones y ofrecimientos a través de los medios. Hasta que hace escasos días se han sentado en una mesa y han firmado un manifiesto en el que ya anuncian algunas medidas que su coalición llevaría a cabo, como la autodeterminación o independencia, el rechazo a infraestructuras vitales para el progreso de Navarra, la imposición del euskera en la Ribera, la exclusión de la enseñanza concertada, que convive perfectamente con la red pública en una ciudad como Tudela, o un proceso de paz, como si en una guerra estuviéramos y no debiéramos distinguir entre víctimas de la barbarie que nos ha azotado durante décadas y verdugos. A este respecto, han dado un paso más, al comprometerse a eliminar el pacto antiterrorista y por las libertades, así como la dispersión de los presos de ETA.

Todo por escrito, con luz y taquígrafos. Su materialización o no dependerá de que Podemos sea determinante, además de emergente, a la hora de configurar el nuevo gobierno que salga de las urnas en la Comunidad Foral. Porque si Podemos es determinante, Bildu también lo será. En manos de la sociedad navarra estará evitarlo o no. A tiempo estamos de reflexionar y valorarlo.

Félix Zapatero Soria

Candidato UPN Tudela