Es gratamente sorprendente que la iniciativa de una adolescente, Greta Thunberg, que hacía fuina cada viernes y acudía al parlamento a protestar por la “hipocresía” de la modélica Noruega, uno de los principales exportadores de petróleo y gas del mundo, haya sido el germen de una movilización global que se ha convocado para el viernes 27 de septiembre. Esta huelga mundial por el clima, convocada y secundada por centenares de organismos “en defensa del futuro, de un planeta vivo y de un mundo justo”, pretende abrir las mentes y hacer cambiar de paradigma a los gobiernos del mundo.
“Nuestra casa está en llamas. Estoy acá para decirles que nuestro hogar está ardiendo”, denunciaba Thunberg, y algo así se va a corear a nivel mundial ese día, esperemos que para que, de forma práctica y útil, se vaya afianzando un nuevo pensamiento que lleve el planeta hacia la sostenibilidad y el mimo al medio ambiente.
En Tudela, los más jóvenes ya han dado muestras de tener sensibilidad en la materia, limpiando al paseo del Prado, indignados por la dejadez y suciedad colectiva. Así, es de esperar que este viernes 27 de septiembre, se produzca una movilización interesante en pro de un cambio de modelo global.
