EHNE considera inasumible por el sector la decisión del Gobierno de Navarra de aplazar un año la segunda parte de los pagos a Modernización de Explotaciones Agrarias, pues esta modificación, junto con la apertura de las nuevas convocatorias en otoño en lugar de en primavera y la reducción de las ayudas en un 10%, van a ahogar económicamente a muchos titulares de explotaciones pendientes de cobrar las ayudas, cerca de 700 personas. Además, el sindicato advierte de que supone paralizar la inversión en la mejora de la competitividad de las explotaciones agrarias, un empeño del sector por hacer bien las cosas que, año tras año, ha garantizado el mantenimiento de la actividad y del tejido socioconómico de los pueblos.
Las personas afectadas han conocido la decisión del Ejecutivo foral a través de una carta envidada desde el departamento en la que se detalla que se retrasa un año el último pago de las ayudas. Es decir, se retrasa el pago de 4,9 millones de euros de 2012 a 2013 y de otros 4,4 millones de euros de 2013 a 2014.
Cabe señalar que esta decisión del Gobierno de Navarra se suma a otras restricciones o aplazamientos de otras líneas de ayudas importantes para el sector agrario como las destinadas a producción ecológica, ganadería sostenible, cumas, modernización de explotaciones agrarias, entre otras. Todas estas modificaciones del Ejecutivo llegan, en un momento sumamente delicado para el sector, caracterizado por el incremento de los costes de producción (gasóleo, energía, fertilizantes…) y precios bajos en origen y, una más que probable sequía que puede agravar, más si cabe, la maltrecha economía de las explotaciones familiares.
En este contexto, llaman la atención las declaraciones de la Consejera de Empleo en relación a el sector agroalimentario, en el marco de la jornada Navarra en la salida de la crisis celebrada en Baluarte la semana pasada, calificándolo como estratégico y uno de los motores para salir de esta crisis por su potencial y capacidad de crear empleo afirmando que su departamento seguirá trabajando para "agilizar trámites, facilitar la financiación, impulsar las ayudas directas y las medidas de fomento de empleo".
Las medidas anunciadas avanzan en sentido contrario. Van a dificultar el acceso a la financiación necesaria para realizar las inversiones y van a poner en serias dificultades a las 700 explotaciones que contaban con la totalidad de esa ayuda para hacer frente a los pagos de los préstamos concedidos. Asimismo, aquellos titulares de explotaciones que esperaban a la convocatoria de febrero para presentar sus proyectos de inversión (infraestructuras de riego, ampliaciones de naves, apriscos, naves de recría, proyectos para explotaciones de pollos camperos…) van a tener que paralizar su proyecto hasta septiembre.
EHNE va a trasladar a la Consejera Goicoechea su más firme oposición a las medidas anunciadas y le exigirá además que no las aplique. También pedirá a la responsable del Gobierno Foral que se responsabilice de las consecuencias negativas que van a ocasionar estas decisiones en materia de financiación y pago de préstamos en el sector agrario.
