Opinión

NaBai desde la Ribera: más moral y mejores caras

HACE algo más de un par de meses que venimos funcionando como grupo en la Ribera, en tanto que personas que no pertenecemos a ningún partido y que, sin embargo, participamos de las ideas y promoción del voto de NaBai.

Nos hemos reunido en varias ocasiones y hemos analizado la situación; circunstancias que vemos bastante positivas para la coalición y su futuro, si es que ésta sabe corregir los defectos e insuficiencias (y ponerse manos a la obra).

Una cosa que nos ha sorprendido un tanto ha sido la sucesión de caras largas que hemos encontrado en Pamplona, y en algún otro sitio, de miembros de la coalición. Entre las expectativas excesivamente optimistas, y luego frustradas porque no tuvieron en cuenta que estas elecciones eran un monumento al bipartidismo, la bajada de votos de algunos partidos nacionalistas en la Comunidad Autónoma Vasca, la abstención y las coacciones a los y las votantes en la Montaña, y, al fondo, el desdichado matrimonio de derechas entre UPN y PSN para cuatro largos años, parece que hubiera motivos para fruncir el ceño y preocuparse más de la cuenta.

Pero aquí vemos lo sucedido de otra manera. Entre otras cuestiones, por la comodidad de pertenencia y emisión del sufragio a una fuerza que admite nacionalistas y no nacionalistas y que, estimamos, ha sabido hacer llegar el mensaje de izquierdas, republicano y vasquista, en todo caso muy plural, a los pueblos de nuestra Ribera. Es bien conocido que en estas tierras hay mucha gente no nacionalista que tiene ganas de apoyar a una fuerza de izquierdas que sepa ensamblar el componente vasco de Navarra, y no necesariamente tener que convertirse en abertzale.

Estas claves, y una campaña de NaBai que ha sabido llegar a los pueblos de la merindad, explican lo sucedido en esta zona ribereña. En las elecciones generales del año 2004 (no hablamos de las municipales donde entran otros factores y alianzas), hubo 1.872 votos para NaBai, de los cuales 1.024 venían de Tudela. En las elecciones al Parlamento español del año 2008, NaBai obtuvo 2.598 votos en la merindad ribera, de los cuales 1.169 procedían de Tudela. Así que, vistas las cifras con frialdad, por comparación con las del año 2004, NaBai ha incrementado el apoyo electoral en un 39% en toda la Ribera y, si lo desmenuzamos, resulta que el 68% pertenece a los pueblos de la Ribera y el 14% a Tudela.

No es para echar cohetes, pero venimos de donde veníamos y nuestro grupo ha analizado que eso se ha debido a la mayor atención prestada por el aparato de NaBai a la campaña en la Ribera, al esfuerzo de los partidos políticos que componen la coalición, y… a nuestro modesto trabajo como independientes.

De momento, hemos deducido que no hay causa para las malas caras y los malos modos. Pero que es urgente corregir, a nuestro juicio, varios elementos: A) Se ha de prestar una mayor atención a la Ribera de las figuras conocidas y de las personas diputadas forales, que han de venir por aquí anual y regularmente, en orden a realizar balances y dar explicaciones de las cosas que nos conciernen (al estilo del balance de la legislatura que realizó Uxue antes de la campaña). B) Las personas independientes hemos de saber cuáles son nuestros derechos y deberes en la coalición, para lo cual ha de elaborarse un estatuto de miembros de la misma y potenciar unos cauces para que podamos participar en las decisiones políticas (también tenemos nuestras ideas con respecto a la política en la Ribera, candidatos idóneos, puestos cuando haya que discutirlos...). C) tiene que cesar esa imagen de rencillas -también aquí tendríamos que opinar lo nuestro- entre los partidos políticos; divisiones sobredimensionadas que, como ha ocurrido con el asunto de la CAN, podrían evitarse con una buena discusión interna previa.