El nuevo Superior General de los Jesuitas, el español Adolfo Nicolás, ha sido elegido en Roma.
Dicen que es progresista y que está en la línea del padre Arrupe, los dos han trabajado en Japón, (por los pobres y con los pobres).
Algunos dicen que puede influir en el Vaticano para encauzar una política aperturista.
Benedicto XVI no está por la labor de volver a aplicar el Concilio Vaticano II y el Superior General de los Jesuitas, seguirá fiel a sus votos de obediencia al Papa.
No confío en que este nuevo preposito consiga nada de nada, ya que es impensable una oposición a "Su Santidad" el dictador infalible. Me gustaria equivocarme.
Mis simpatías han estado siempre con los Jesuitas, pero si estos no saben o no pueden influir para modernizar la Iglesia de Cristo, consiguiendo la renuncia del Sumo Pontífice dando el poder al pueblo cristiano, quedarán, para mí, descalificados y complices, como son ahora, de una doctrina que traiciona el mensaje de Jesucristo.
Benedicto XVI es el verdadero impedimento para que la Iglesia Católica entre en una etapa de ecumenismo a nivel mundial: la union de todas las iglesias cristianas.
Solo su renuncia y con él, de toda la Jerarquia Católica, podria salvar a la Iglesia Católica del desprecio generalizado, que ya se siente por parte de la mayoría del pueblo de Dios.
El daño que hacen al mensaje de Amor de Cristo, hace que huyamos a millones del seno de una Iglesia de Roma, que se ha apartado del Evangelio mitificando a Jesús de Nazharet, para que estos impostores, sigan usurpando un poder que no les corresponde pues nunca hemos sido consultados. Y aunque la Iglesia somos todos, asi lo somos solo en teoría.
Mi confianza está en que el pueblo llano les niegue el pan y la sal para obligarles a volver al verdadero cristianismo: todos hermanos, todos iguales y con voz y voto para ayudarnos y amarnos como el nos amo, dando ejemplo al mundo de amor y democracia en ayuda de todos los seres humanos, sin imponerles, ni amenazarles y con un respeto a las diferencias.
Dando a las mujeres y a los gays sus derechos de igualdad ante los hombres, dignificando el sexo a la categoría que le corresponde y no como ahora, que se le considera malo, perverso y digno de castigos eternos e infernales.
Haciendo justicia a los pobres y aplaudiendo todos los adelantos científicos del genero humano en su camino hacia Dios.
Miguel Angel Soro Falces
