Nuevamente la Empresa Ribera, y ya son 19 ediciones, celebra su día grande, mejor dicho, su noche grande, que cierra una jornada más, para distinguir los valores de personas y organizaciones que merecen nuestro respeto, reconocimiento y que representan el ejemplo al que todos aspiramos en nuestra trayectoria personal y profesional. Un reconocimiento de las empresas a estas personas que con voluntad, esfuerzo y solidaridad, se enfrentan con resolución, a acciones y retos difíciles; identifican las oportunidades de negocio y organizan los recursos necesarios, sacrificando tiempo de su familia, para destinarlo al servicio de sus empresas, en la confianza de que el trabajo siempre dará sus frutos.
Esta, es una noche especial para la AER, ya que ponemos cara, nombre y apellidos a hombres y mujeres de empresa, y es nuestro deber, exportar sus historias a la sociedad, para que sepan lo que significa ser empresario, q en la mayoría de las ocasiones, es sinónimo de entrega, sacrificio y esfuerzo; es ser generador del estado de bienestar y riqueza de la sociedad; personas, que son capaces de asumir un modelo de vida, en el que el riesgo económico y su patrimonio siempre está presente y asumido.
Este año, estar aquí físicamente otorgando estos premios, tiene un significado especial tras la pandemia; esa pandemia que ralentizó nuestra vida diaria, que nos hizo vulnerables y que desgraciadamente se llevó a muchos de los nuestros.
Si algo hemos aprendido en esta pandemia, es que todos somos necesarios, desde el médico hasta el reponedor de un supermercado, desde la enfermera hasta el agricultor que ha seguido cultivando sus hortalizas, desde el empresario que fabricaba respiradores, al operario que desinfectaba cada noche nuestras calles.
Y sí, nuevamente el empresariado ha estado ahí, reinventando sus máquinas para adaptarlas a la fabricación de máscaras con las que protegernos, EPIS para nuestros sanitarios o acelerando sus producciones para que cada familia tuviera lo necesario para subsistir.
En alguna ocasión, nuestra visión de la economía, de la política y de la sociedad de la Ribera, se nos ha tachado de “victimista”, pero les aseguro que NO se trata de eso, sino que es SÓLO nuestra visión propia, subjetiva, de nuestra realidad diaria y que mas que enfrentar, pretende dar luz a esta sociedad, para que todos de la mano, hagamos de esta Navarra nuestra, una Navarra mejor y más próspera.
La mejor política social es la de crear empleo y facilitar a sus trabajadores un digno estilo de vida. Por eso, reitero como esencial a quienes nos Gobiernan y a sus asesores, que tengan en consideración lo que los empresarios necesitamos y lo que nos preocupa.
Nos preocupan los últimos datos de 2021 sobre el PIB que alertan de una ralentización del crecimiento, lo que, unido a la situación actual de encarecimiento del precio de la energía y de materias primas y los problemas en la cadena de suministros, obliga a focalizar los esfuerzos en la recuperación apoyando al tejido productivo y la creación de empleo.
Nos preocupa que bastantes empresarios se quejende que las ayudas para el desarrollo e inversión no lleguen como se les había prometido. Y, por el contrario, nos enfrentamos a medidas negativas antela cada vez más dura competencia exterior.
Nos preocupa que las empresas no contemos con soluciones protectoras que se ajusten a las características y dimensiones de estas. La legislación actual, no distingue el tamaño de las empresas. Protegiendo a la empresa, se protege a los trabajadores. Si no hay empresa no hay empleo.
Nos preocupa que las empresas en general deban ser atendidas y apoyadas por las entidades públicas competentes, facilitando los trámites burocráticos con la administración. En el caso de las pequeñas empresas, es imperativo!!. En Navarra hay aproximadamente 38.000 empresas por número deasalariados. Por zonas geográficas de las riberas del Ebro, Arga y Aragón hay unas 3.000 y en la Riberade Tudela superan las 5.000
Nos preocupa que ahora que se están anunciando subidas en las cotizaciones de Seguridad Social, que la energía cada vez es más imposible, los transportes, las materias primas; hacen falta contramedidas que favorezcan el tejido industrial que tenemos, en algunos sectores demasiado atomizado, pero antes de afrontar ese problema está el mantenimiento de potenciar lo actual, lo que tenemos. Por esodemandamos al Gobierno de Navarra que, ante esta situación dramática, sea cauto a la hora de acompasarlos gastos a los ingresos y guarde un remanente suficiente para apoyar a las empresas que están sufriendo con fuerza este Tsunami en sus economías.
Nos preocupa que las ayudas no sean rápidas, eficaces, flexibles y de sencillo tratamiento, ceñidas ala realidad clara y objetiva, no a través de informes y expedientes de solicitud complicados y llenos de burocracia, que cuando se dan, en el mejor de los casos, ya se han marginado o ya no son útiles (o el ridículo de justificar que se ha hecho ya el pago de la inversión antes de ser concedida).....
Nos preocupa que en una economía de mercado, donde el empresario invierte y arriesga su patrimonio por un proyecto que normalmente crea riqueza para la sociedad y da empleo, a cambio, deba recibir una adhesión firme y con facilidades, no pegas y a veces con actuaciones de funcionarios rígidos.
Nos preocupa que el empresario no disponga de seguridad jurídica, ...lo que le ley dice, que se cumpla!!... que un contrato firmado, modelado y registrado oficialmente no le digan luego que no vale.A la clase política, les recuerdo que Esto es muyimportante!!
Nos preocupa que se critique la temporalidad del empleo, pero nadie nos garantiza un trabajo seguro y una cartera de pedidos mantenida.
Nos preocupa la reforma laboral, esgrimida como un trofeo político sin contar con la voz de los empresarios.
Nos preocupa la falta de mano de obra cualificada y no cualificada en nuestras empresas. Por eso, por una parte, fomentemos que el personal cualificado que estamos formando se quede en nuestras empresas, y por otro lado, el no cualificado, hagámoslo depender menos del acomodo de las ayudas sociales. (Las ayudas, SI, pero no deben ser sustitutas del trabajo remunerado).
Nos preocupa la confrontación diaria entre partidos llamados a liderar Navarra en los próximos años. Hablamos de COOPERACIÓN en las empresas, pero vemos que esto se olvida en la vida política.
Nos preocupa el traspaso de determinadas líneas rojas, el que ustedes mismos se marcaron y que hacende Navarra una comunidad que pueda poner en cuestión el entorno de confianza y estabilidad políticaque garantice un futuro al inversor.
Nos preocupa la formación, y por el foro en el que estamos, la formación en la Ribera.
La presencia de la UPNA en Tudela y la ampliación de estudios de la FP, no la podemos valorar sólo en términos de costes. Para cualquier sociedad resulta mucho más cara la ignorancia, que la formación de su gente.
Una formación que debe estar cercana a las necesidades de las empresas, y que resulta estratégica, más, cuando la competencia se intensifica en unos mercados donde las empresas que quieran sobrevivir, deberán abordar iniciativas que les ayuden a incrementar su productividad y capacidad de innovación para mejorar su posicionamiento competitivo. Reivindicamos que se mime y se adecuen nuevas carreras/grados y lo que ello conlleva en nuestro campus de Tudela, para que resulte atractivo a los estudiantes.
La juventud universitaria, además de estudiar, quiere lugares de esparcimiento, cultura, accesibilidad y ocio. La realidad nos dice, que para ellos, es más atractivo el campus de Pamplona que el de aquí por lo que se les ofrece.
Y las empresas, no tengan duda, irán allí donde saben que pueden abastecerse de
personas preparadas para sus necesidades laborales.
Y enlazando con la educación, nos entristece que la sociedad actual, no tenga en consideración lo que nos inculcaron nuestros padres, educarnos en la cultura del esfuerzo, nos enseñaron que quien estudia aprueba, que quien se prepara encuentra un empleo... La nueva ley de educación recién aprobada debiera ensalzar el valor del esfuerzo, y premiar el TALENTO de los jóvenes que SI han querido formarse.
¿Se imaginan que al atleta de salto de altura se le fuera bajando o quitando el listón para clasificarse para unas olimpiadas?
Desde las empresas, valoremos pues a todos aquellos que, en su día a día, se esfuerzan en superarse.
¡Y qué decir de la fiscalidad! Nuestra comunidad foral sigue siendo privilegiada en términos económicos, sociales y de bienestar, pero igual de cierto es que la distancia con el resto de las regiones españolas es cada vez más estrecha; Seria un error autocomplaciente creer que la capacidad de Navarra para crecer, está asegurada. El índice autonómico de competitividad fiscal, nos señala q hemos pasado del séptimo al decimocuarto puesto en los últimos seis años. La política fiscal implantada ya en la anterior legislatura, ha posicionado a Navarra al frente del ranking de los que más impuestos pagan, y eso no es la mejor política para crear un entorno atractivo para el dinamismo económico y de atracción de empresas y por tanto, generación de empleo en tiempos de crisis como la provocada por la pandemia y vaivenes de los ciclos económicos; si además lo acompañamos con políticas de pactos con formaciones opositoras a cualquier obra estratégica para el futuro de la comunidad, como el TAV o Canal de Navarra, supone un preocupante lastre para el desarrollo de Navarra y especialmente para nuestra Ribera.
Consideramos necesaria una revisión profunda del sistema fiscal para que Navarra vuelva a convertirse en un territorio atractivo para la inversión y el talento por lo que solicitamos al Gobierno foral que en los presupuestos de Navarra para el 2022 se centren en la recuperación económica aprovechando la importante inyección de los fondos europeos.
Así, por ejemplo, señalamos que eliminar incentivos como el de la deducción por creación de empleo, nos aleja de otros sistemas tributarios cercanos, como el del país Vasco, con consecuencias negativas para la competitividad de nuestras empresas.
Habrá que tener presente, que, para redistribuir renta o riqueza, primero hay que crearla.
Somos conscientes de que mirar al futuro es mirar a Europa y debo informaros de que los empresarios Navarros a través de la CEN hemos puesto en marchala “Oficina técnica de proyectos europeos” para ayudar a las empresas y atraer fondos a esta comunidad foral y es que los fondos de recuperación europeos suponen una magnífica oportunidad para nuestro modelo productivo y es importante, que los fondos lleguen lo más rápidamente posible a las empresas y que se dirijan a la transformación de la economía Navarra para hacerla más competente yresistente ante la amenaza de otras economías lejanas.
Por eso los empresarios Navarros, pedimos eficacia y eficiencia al gobierno para la canalización y gestión de los fondos para que lleguen a las empresas Navarras y así consolidar y aumentar nuestro peso industrial.
Cuidemos la industria navarra de hoy para ser líderes en la del mañana.
Y no sería yo, si no hablara de Morosidad, que en estos tiempos que transitamos, aún tiene mayor relevancia. Y es que al hablar de morosidad, os recuerdo que hay 2 responsables: El moroso, y la administración. Quiero ser rotundo una vez más en este tema: Reniego de los empresarios que hacen dela morosidad su profesión gracias a la indiferencia y permisividad de la administración. Sra. Presidenta hay solución, existe una ley, al igual que hizo la Ministra Díaz, le doy una pista: Implanten el Régimen sancionador.
En definitiva, Queremos una Navarra más próspera y vertebrada y para eso necesitamos que nuestra Riberatenga las mismas oportunidades, las mejores infraestructuras posibles y que de una vez por todas se cumpla el sueño de ser una zona imprescindible dentro del eje del Ebro por su situación y sus innumerables posibilidades.
Ante la presencia de la amplia y variada representación política aprovecho la ocasión, para decirles que el futuro de esta comunidad está en juego, y depende de muchos de los aquí presentes; tengan en cuenta que la clase empresarial, nos la jugamos cada día por todos los ciudadanos con nuestros recursos y nuestro trabajo.
Es su deber generarnos un entorno de confianza, estabilidad e ilusión suficientes para que entre todos creemos la Navarra del futuro, esa Navarra donde forjar nuestros sueños, esa navarra diversa y maravillosa que invite a nuestros hijos y nietos a vivir aquí.
