Opinión

La crisis energética del 2022

En este tórrido verano de 2022, todas las contradicciones que habíamos acumulado durante tantos años está explotando juntas. Además de los problemas ambientales, con el Cambio Climático a la cabeza, nos estamos encontrando con que nos falta energía. Ya no es solo que la gasolina, el diésel o la electricidad estén caros: es que hay muchos países que están empezando a quedarse sin estas formas de energía fundamentales en la vida moderna. En algunos casos, como el de Sri Lanka, la falta de todo, inclusive alimentos, ha llevado a la revolución y al colapso.

No se podía saber, nadie lo vio venir… ¡Mentira! En 1972, Denis Meadows, Donella Meadows y Jorgen Randers, científicos del prestigioso Massachussets Institute of Tecnology, publicaron su informe “Los límites del crecimiento”. En él, mostraban como las simulaciones de ordenador indicaban que a principios del siglo XXI la sociedad mundial podría colapsar si no había un cambio de rumbo radical en nuestra relación con el planeta y con los recursos; de otro modo, la contaminación y la escasez podrían llevar al colapso de la población humana. El informe fue muy mal recibido y fue vilipendiado con argumentos absurdos y burdas tergiversaciones de su contenido real (por ejemplo, “siempre faltan 30 años para que se acabe el petróleo”). Por desgracia, sus pronósticos se han cumplido paso por paso en cada revisión que se ha hecho.

Aún estamos a tiempo de evitar los peores escenarios. ¿Nos pondremos en marcha de una vez?