Opinión

Alejandro Toquero, con estos mimbres, ¿qué cestos?

Recientemente Tudela ha estrenado alcalde. En este caso, ha habido un cambio. El tripartito de la legislatura 2015-2019 (IE, PSN, Podemos) no ha reeditado su mayoría en las urnas y Navarra Suma (UPN, PP y C’s) gobierna con mayoría absoluta. 

En estos pocos días transcurridos desde que el 15 de junio se constituyeran los ayuntamientos, ya hemos empezado a ver algunos signos de lo que va a ser el de Tudela. Uno de ellos es cuestionar al anterior equipo de gobierno sin tener pleno conocimiento de lo que se critica, dando una imagen muy pobre y de poca solvencia política, impropia del gobierno de la segunda ciudad de Navarra. Otro es la presencia del alcalde y concejales y concejalas en la procesión del Corpus, que nos dejó imágenes más propias de mediados del siglo XX que del siglo XXI. Presencia, hay que aclarar, no a título personal sino oficial, olvidando que vivimos en un estado aconfesional tal como recoge el artículo 16.3 de la Constitución de 1978.

Tenemos también el esperable rechazo a que el euskara sea valorado como mérito en oposiciones municipales. Parece ser que el Sr. Toquero y su equipo ignoran que, además de otras opciones para aprender euskara, en Tudela hay una Ikastola desde el año 1984 y que sus primeros alumnos y alumnas tienen hoy 33 o 34 años. Tudelanos y tudelanas euskaldunes, con el mismo derecho que el resto a que sus conocimientos lingüísticos sean valorados a la hora de acceder a la función pública  al menos en la misma medida que otras lenguas.

Pero si hay algo que me ha sorprendido realmente ha sido el deseo del Alcalde de Tudela de salvar esa diferencia entre norte y sur que existe en Navarra y que no beneficia a nadie, según sus propias palabras. En principio me parece un objetivo loable, aunque la idea de “diferencia norte-sur” denote un reduccionismo algo simplista, puesto que la sociedad navarra es mucho más plural y compleja que todo eso. Al margen de esta consideración, una lectura pausada de la introducción del programa electoral municipal de Navarra Suma deja totalmente claro que la coalición está muy lejos de pretender nada que no sea la Navarra y la Tudela en la que ellos y ellas creen, la única y la verdadera. No hay concesiones a la convivencia ni a la pluralidad de la ciudadanía de Tudela. Las esperanzas que pudiéramos haber forjado se disiparon casi por completo al saber que el primer paso que ha dado nuestro alcalde en aras de mejorar la convivencia ha sido entrevistarse con el Alcalde de Pamplona, Enrique Maya, cuyas primeras medidas en el Ayuntamiento de Pamplona son de sobra conocidas. 

Durante la pasada legislatura, tanto UPN como sus socios alimentaron la división y el enfrentamiento de los navarros y navarras a conciencia y con total irresponsabilidad en los ayuntamientos, en el Parlamento de Navarra y en las calles. Navarra Suma en Tudela cree que tiene autoridad para definir cómo somos todos los tudelanos y tudelanas, excluyendo y privando de derechos a quienes no nos ajustamos a su esquema. Sé que hay que dar 100 días de cortesía a la nueva corporación, pero con estos mimbres, ¿alguien puede creer que Alejandro Toquero va a ser el alcalde de todos los tudelanos y tudelanas?