Opinión

La mano

Es de obligado cumplimiento, encontrar diferencias apreciables en la trascendencia social y científica entre descubrimientos a lo largo de los tiempos según países, formas, o religiones. El hallazgo de una mano de bronce en Navarra, parece ser que ofrece mucho más porque según ¿Quién? o ¿Cómo? se describa lo escrito en ella, parece ser desencadena o se busca un enlace con un proyecto político o movimiento social de actualidad.

La Mano, como protagonista de la acción manipular, manipulación, manipulado, describe no solo costumbres pasadas, si no interpretaciones actuales que refuerzan  vínculos con próximas citas sociales. Quizás, solo quizás, el posicionamiento descriptivo prematuro  o personal de este hallazgo, busca entre otras cosas, realzar estados emocionales  que solo afectan  a una minoría de navarros.

Cuantas cosas por descubrir, cuantas leyendas para la historia que contar, pero siempre aquellos trovadores que manipularon sus letras hasta la deformidad de la propia historia. El rigor científico, divide a los traductores de los que la hallaron y por ende, generan más controversia que Alegría.

Es libertad de cada uno, otorgar el significado e importancia que se quiera a esta mano, que si demuestra que el bronce era tallado y grabado. Los libros de ciencia, la tecnología, es el legado de esta civilización, el de otras fueron estos objetos que nos enseñan parte de sus maneras de vivir. En un caldo de cultivo húmedo con buen abono, es fácil que una semilla germine o que por lo menos lo intente.

Esperemos, que este hallazgo se quede en su parte de historia a la que perteneció  y no ayude a cuestionar una nueva, reduciendo el interés científico divulgativo.