Opinión

Federación ¿Dónde está?

El terrible covid ha dejado ver muchas de las deficiencias, carencias, y faltas de estímulo que sufrimos los diferentes grupos asociados consorciados en alguna federación. En este caso, la de caza, ha sido pasiva frente al perjuicio grandísimo de los propietarios de los diferentes aprovechamientos que han perdido sus trabajos y sus métodos económicos de vida. La caza actividad al aire libre con riesgo mínimo de contagio en su práctica y cumpliendo la reglamentación de seguridad del covid para reuniones y sorteos, se debería haber permitido a nivel nacional oxigenando las terribles pérdidas ocasionadas ya en el sector, debido a las restricciones turístico hosteleras. ¿Dónde ha estado la federación española todo este tiempo? La federación como tal, es la que dispone de empaque jurídico para haber logrado que se hubiera declarado bajo legalidad, la caza como actividad esencial no solo de daños, si no como recurso de muchas autonomías.

Me consta se escribió una carta al presidente del gobierno que no se si ha tenido respuesta o no, pero que en cualquier caso a tenor de la evolución de los hechos, no debería haber parado las movilizaciones y reclamaciones para sacar adelante la actividad de la caza en ambiente seguro.

La federación, es un organismo que está bien nutrido y mantenido con unos buenos sueldos para la directiva, que deberían haberse dejado la piel para sacar esto adelante si no ¿de qué sirve? Pagar una tarjeta federativa para tener un seguro que todos ya tenemos o asistencia jurídica que si la necesitas una vez en la vida, te ponen multitud de trabas debido a la letra pequeña.

Esto ha sido vergonzoso, la federación sigue, permanece oculta, inmersa en la elección y arranque con un nuevo presidente. En los puestos que sirvan para defender los intereses de colectivos, deberían estar personas no solo capacitadas, si no con espíritu de lucha para eso están y se les paga.

Mientras, muchos cazadores no han podido ir a cazar y lo que es peor, después de pagar grandes cantidades de dinero, no han podido hacer uso de los aprovechamientos .Por lo menos, que lideren una plataforma para reclamar los perjuicios ocasionados como ya han hecho los  hosteleros, porque no hablamos de algo que comprometía la salud o por lo menos, en menor proporción que gimnasios que se mantuvieron abiertos. Es y ha sido, falta de capacidad de gestión desde el sentido común y la proporcionalidad y eso se debe de luchar. Solo espero que muchas empresas destinadas a la cría de animales para la caza o servicios relacionados, puedan sobrellevar este penoso año.