Hay muchas maneras de utilizar la palabra unión, dependiendo del asunto o materia en el que se utiliza. Cuando se usa para calificar aptitudes físicas, mecánicas, o incluso quánticas, adquiere un solo significado no reversible, suma o aumenta. Cuando se usa en materia o términos más etéreos, superficiales o socialmente volátiles, donde el ser humano toma parte, entonces la palabra unión puede adquirir, diferentes significados reales incluso contrarios a la raíz de sumar o aumentar.
¿Quién es capaz de decir que algo está unido, si no se comprueba de principio a fin? Es posible, que dentro de la unión exterior haya la mayor y profunda separación interior. Cuando en una unión, coalición, agrupación, se acuerdan bases, se sientan pesos jerarquiquos y roles, todos ellos deben de ser consensuados con mesas de aprobación incrementales, si no esta unión inicial bajo el desgaste del tiempo, puede convertirse en tirantez y ruptura.
Estamos en una sociedad, donde se da vida administrativa y burocrática a pequeños grupos sociales generando y fraccionando las opciones de voto. Esto, es debido a una libertad socio-política sin gestión, que permite muchas banderas para un mismo equipo algo que es erróneo de fondo pero no de forma, si la raíz es la misma hay que habilitar los canales que permitan esas configuraciones respetando dicha raíz. ¿Qué es mejor? una unión ficticia grande o varias pequeñas soportadas en consenso y acuerdo.
En la actualidad, vemos como varios partidos gobiernan en coalición y compensan de alguna manera el lastre de que los grandes, pierden poco a nivel local o autonómico.
La grandeza de la democracia está ahí en poder llegar a acuerdos, en hablar, entenderse y generar mesas de conocimiento a tal efecto como ya demostraron otros, en tiempos pasados. La verdadera unión no la hacen las siglas, ni el capital, ni incluso el objetivo, la hacen las personas que forman ese conjunto unido, solo ellas pueden mantener o incluso aumentar ese conjunto.
Es hora de reflexionar no solo desde un punto de vista visceral o social ¿Quién queremos ser? O ¿Cómo debe de ser? Si no ¿Dónde vamos a llegar? ¿Es esto lo que necesitamos? Porque en etapas cruciales, es donde se juegan los partidos más importantes y Navarra está jugando, va a jugar, el más importante para su futuro.
