Opinión

Criterio medioambiental erróneo

Hemos visto, como las diferentes actuaciones medioambientales en Navarra durante los últimos 25 años, han dado como fruto la peor gestión natural y de aprovechamientos de la historia de esta comunidad. 

Después de unas políticas nefastas en cuanto a la conservación y aprovechamientos de nuestros bosques, unido a las salomónicas decisiones de que especies son alóctonas y autóctonas. ¿Quién se protege? y ¿Quién se elimina? Cuales son plaga y al año siguiente son protegidas, llega la política en reforestación. 

No solo el criterio medioambiental en cuanto a la especie animal se ha visto dañado, si no que el vegetal aún ha sido peor. Reforestaciones de pinos se siguen haciendo (como la propuesta de la recuperación de los depósitos en Tudela)  después de que se haya comprobado por experiencia solo aportan sequía, erosión, en el suelo y ningún subaprovechamiento. La matarrasa y gestión de corte de estos pinos muchos años después con el beneplácito y orden de un departamento que tiene mucho que explicar ¿Por qué? La gestión del suelo el análisis de las tierras y la posibilidad de generar comunales con subaprovechamientos es, lo que necesitan los pueblos. 

Las carrascas aportan comida, leña, además de disfrutes como setas y caza, es una falta total de capacitación que se siga repoblando con pinos o con especies vegetales como eucaliptos que degradan el suelo y reportan solo fuego. En una comunidad arrasada por el fuego el año pasado que está experimentando un incremento de incendios anualmente terrible con políticas de prohibición y restricción sobre los aprovechamientos locales, todavía no ha habido cambios ni aceptación de responsabilidades. 

La mesa de conocimiento que lidere un cambio medioambiental, es necesaria de manera urgente poniendo capacitación y proyectos de futuro para diseñar un patrimonio animal y vegetal navarro de acuerdo con sus costumbres y necesidades. Solo los partidos políticos, pueden forzar nuevas líneas de trabajo para este departamento además de  proyectar y cambiar aquellas conductas estancadas en la limitación de uso y disfrute. Solo de esta manera, se verán crecer los recursos naturales.