Todavía, y a día de hoy, la Ribera navarra, la del norte y del sur, la de Estella y la de Tudela, suponemos algo más del 25% de la población total.
Y eso, a pesar del tremendo error de modelo político y socio-económico, impuesto desde el año 96, que concentró todos los recursos navarros en un solo polo de desarrollo en la cuenca de Pamplona, y que ha provocado la mayor desestructuración y desigualdad entre navarros de su historia.
El desmantelamiento constante de casi toda actividad económica (servicios y productiva) fuera de Pamplona, ha llevado al despoblamiento, no ya de las zonas clásicas de Roncal y Sangüesa, sino del Baztán, la Barranca, Tafalla y Estella. La Ribera entera aguanta algo más dada su posición geoestratégica y recursos propios, pero asolada por un paro casi tres veces superior a Pamplona y 5 puntos más de pobreza. Es decir, si seguimos con este modelo, el paro se solucionará en Tudela y la Ribera, al igual que en el resto de Navarra, cuando su población sea como la del Salazar, con un paro del 7%, dado que no queda nadie.
Después de estos 20 años de destrucción sistemática de lo que un día quiso ser el segundo polo de desarrollo de Navarra, la mayor y casi única fuerza que queda a Tudela y la Ribera, es su población, que aún representa casi el 25% de todos los navarros, y así, a todos los riberos, no nos queda otra opción que unirnos, cambiar ideologías por ideas, enfrentamientos por propuestas, y defender una aplicación de este porcentaje en todos los parámetros necesarios para una auténtica reconstrucción y vertebración de Navarra
Exigir y convencer a los tudelanos, riberos y navarros como punto maestro para la imprescindible regeneración socio-económica de la Ribera, y con ella de toda Navarra, se basa en el siguiente axioma:
Si la Ribera Navarra representa el 25% de la población de Navarra, se necesita que el 25% de toda la estructura presupuestaria, socio-económica y política, pública y privada, en la Ribera. No sólo para beneficio de la Ribera sino de toda Navarra, auténtico método de vertebración y potenciación de los recursos de todos los Navarros para un futuro.
"Exijamos y convenzamos. Olvidemos rencillas, abandonemos el enfrentamiento entre ideologías, utilicemos nuestro voto y nuestra voz para elegir, exigir y decidir"
En el artículo anterior lanzábamos la siguiente pregunta sobre PEC de Tudela, aplicable al necesario Plan Estratégico para toda la Ribera que debe hacerse. ¿De dónde y cómo se obtendrán los apoyos necesarios y la financiación para desarrollar y llevar a cabo este fabuloso plan estratégico de resurrección de Tudela y de toda la Ribera? La inversión y el gasto actual de Navarra en la Ribera ronda el 8%. Sólo con un cambio drástico en el modelo de concentración de toda la riqueza en la Cuenca de Pamplona, será capaz de resucitar no sólo la Ribera sino todas las zonas de navarra condenadas por él a la muerte.
Convencer al resto de Navarra y Pamplona, que la vía de futuro para todos, pasa por poner a trabajar todos los recursos que nuestra tierra nos ofrece. La Ribera por ser la puerta geoestratégica de Navarra al resto de España, y con la Montaña por ser el punto de unión con el mar y el resto de Europa.
Exijamos y convenzamos. Olvidemos rencillas, abandonemos el enfrenamiento entre ideologías o nacionalismos, entre izquierdas y derechas, entre vascos y/o navarros. Utilicemos nuestro voto y nuestra voz democrática para elegir, exigir y decidir.
No puede ser que cuando la Volswagen estornuda, Navarra se ponga con fiebre a 40 grados.
Ángel Guillén
Empresario ribero