Opinión

El nuevo PEC 2030

Ángel-Guillén.jpg

Por segunda vez (la primera fue hacia 1993), la empresa ribera EIN, dirigida por Abel Casado, tudelano y uno de los mejores profesionales en economía y asesoría de toda España, nos presentó un nuevo Plan Estratégico para el desarrollo social y económico, en esta ocasión de Tudela, y por ende un inicio para un plan de la Ribera, ya que no se puede entender una sin la otra.

A semejanza de lo ocurrido en los años 90, este Plan intachable y técnicamente superior, volverá, sin lugar a dudas, a despertar todas las adhesiones de los tudelanos y riberos, máxime cuando ya ha sido capaz de ser consensuado por todas las fuerzas políticas del M. I. Ayto., que lo aprobará en magna sesión inmediatamente, pasando a ser el autentico programa socio-económico de la ciudad y de la Ribera para los próximos 20 años, gobierne quien gobierne y mande quien mande. Los temas de regeneración democrática, la lucha contra el despilfarro, la corrupción, la prepotencia,  etc. son temas que pertenecen a otro marco más político y judicial.

"Es imprescindible el debate de análisis sobre dónde estamos y por qué hemos llegado hasta aquí"

Pero una cosa es la adhesión, siempre inquebrantable, y otra muy distinta, si conseguirá despertar la ilusión, el apoyo unánime y la credibilidad que tuvo el fracasado plan de 1993 entre todos los riberos, y de aquí nacen mis dos principales preguntas.

El Plan Estratégico de 1993 recordaremos que establecía a Tudela y la Ribera como el Segundo Polo de Desarrollo de Navarra, y salvo pequeñas realidades socioeconómicas como la mini universidad y el despertar turístico, el hecho objetivo es que la Ribera se ha convertido después de 20 años, dicho sea de paso con el continuado gobierno de UPN, con apoyos del PSN, en la zona más empobrecida de Navarra con una tasa de paro entre el 23 y el 30%, el doble y el triple a la media navarra del 15% y del 12% en Pamplona, y, no hablemos del terrible sangrado constante de emigración juvenil por falta de perspectivas de futuro.

¿Cuáles fueron las razones para que dicho plan fuera abandonado y nunca intentó aplicarse a partir del año 96? Esta pregunta ha sido realizada durante años a múltiples responsables políticos y económicos de Navarra, y nunca ha sido contestada. ¿Qué hemos aprendido de aquel fracaso para evitar que vuelva a suceder?

"Cuáles son las propuestas para sacar de este agujero sin futuro a nuestros hijos y resucitar a nuestra tierra"

Y, por supuesto, la gran pregunta: ¿de dónde y cómo se obtendrán los apoyos necesarios y la financiación para desarrollar y llevar a cabo este fabuloso plan estratégico de resurrección de Tudela y de toda la Ribera? Si desde el 96 el apoyo a los planes de la Ribera han sido prácticamente nulos, ¿por qué ahora va a ser diferente? ¿Qué hay que hacer para que no sea así? ¿Cuál es el real compromiso de las fuerzas políticas y económicas navarras en llevarlo a cabo? Máxime cuando las fuerzas tudelanas y riberas son muy inferiores y en situación de práctica subsistencia a diferencia de en los años 90.

Con este artículo, este simple pequeño empresario que ha realizado toda su vida profesional y jugado su patrimonio en el mercado tudelano y ribero, inicia una serie de aportaciones personales al imprescindible debate de análisis sobre dónde estamos, porqué hemos llegado hasta aquí, y, por supuesto, cómo hace este plan, cuáles son las propuestas que todos los riberos deben hacer suyas, para sacar y resucitar a nuestra tierra y a nuestros hijos de este agujero sin futuro.

Ángel Guillén

Empresario ribero