A las puertas de unas nuevas elecciones, los ciudadanos nos enfrentamos cara a cara a la gran mentira de la democracia. En este caso, a la gran mentira Europea.
Si, como parece, la abstención supera en torno a 20 puntos a la participación, lo verdaderamente democrático sería la dimisión inmediata de todos y cada uno de los políticos en sus cargos y la abolición de la actual Constitución Española.
No es retórica, palabras vacías o negatividad, es la rotunda realidad de que la mayoría de los ciudadanos están hartos de que se les tome el pelo. Si hacemos caso a las encuestas sociológicas,
el paro, la corrupción y los políticos son los principales problemas de los ciudadanos.
A esto, según mi opinión, la falta real de poder de decisión de los ciudadanos es la piedra angular en torno a la cual gira el fraude. Son aquellos que se aferran al poder los que eligen a los jueces y fiscales que les deben juzgar por malversación, blanqueo y, en general, por la sangrante corruptela que azota las arcas públicas,
lo que animan a los ciudadanos a dar la espalda a las urnas.
"Si hacemos caso a las encuestas sociológicas, el paro, la corrupción y los políticos son los principales problemas de los ciudadanos"
Es necesario ser un gran matemático para saber cómo el poder fáctico utiliza el voto nulo, en blanco o, simplemente, la abstención.
La alternativa sólo pasa por modificar y democratizar las estructuras de poder, y esto sólo se conseguirá cuando el pueblo se de cuenta de esto.
¡Que ustedes lo voten bien!
Txiki
