Los viajes en moto, sobre todo para aquellos que son auténticos aficionados, constituyen un auténtico placer y una experiencia única. No obstante, el motorista es más vulnerable en la carretera por muchas razones y conviene tomar nota de algunos consejos antes de disfrutar sobre dos ruedas.
El primero de ellos tiene que ver con el ritmo de viaje y el clima. Es más recomendable realizar unas pocas etapas de más que querer abarcar demasiado de una tacada. No debemos forzar al cuerpo, ya que es nuestra herramienta, aún más que la propia motocicleta. Sobre las condiciones climatológicas, adelantarse a las previsiones y estar pendiente de su evolución son obligación para cualquier motero.
En lo que a equipamiento se refiere, siempre hay imprescindibles: calzado protector; el casco, si es integral, mucho mejor; cazadora y guantes no deben faltar. A todo ello, no debemos olvidar un adecuado kit de herramientas y los mejores sistemas para llevar nuestro equipaje. Las alforjas siempre son útiles si no se cuenta con un compartimento de gran tamaño en la parte trasera de la moto.
En este sentido, cabe destacar la importancia de llevar a salvo la copia de nuestra llave de la moto, donde se puedan perder, y también la documentación, más sensible al viento y a la lluvia que nuestra propia máquina.
