La alimentación es uno de los pilares de la salud, en los últimos años hemos ido abandonando nuestra dieta mediterránea basada en frutas, verduras, legumbres, guiso tradicional de carne o pescado y el uso del aceite de oliva.
Hemos pasado a una dieta con una baja ingesta de verdura, exceso de hidratos de carbonos del tipo pasta, arroz no integral, patata frita, con una ingesta elevada de comida precocinada rica en sal, grasas saturadas (grasas trans) y aceites que no son de oliva (palma, etc.), además de bebidas azucaradas con gas que han hecho que la obesidad, la diabetes, la hipertensión arterial, las alteraciones del colesterol sean cada vez más frecuentes y afecten a la población a edad más temprana.
Por lo tanto, tenemos que reflexionar y recuperar las verduras, legumbres como fuente principal de nuestra dieta, introducir los alimentos ecológicos, de cercanía, frescos, de temporada que tenemos la suerte de tener en nuestra variada y admirada huerta Tudelana. El ritmo de vida frenético que llevamos debe encontrar una pausa para preparar comida de manera más saludable, ecológica, variada, de producto fresco alejándonos de los productos que pueden permanecer en una bolsa durante meses sin perder sus características gracias a grasas modificadas.
Para darnos un capricho después de la comida nos queda el chocolate negro con más de 70% de cacao y bajo en azúcares.
La actividad física combinada con la dieta nos permitirá mantener una alto nivel de energía, disminución del estrés y la ansiedad, mejorar el descanso nocturno, en definitiva, aumento de nuestra calidad de vida. ¡Feliz 2020!
