Durante cuatro años, hemos tenido la sensación de tener la casa ocupada. Una palabra que se ha puesto de moda. Nuestra ciudad es capaz de hacer que la adoren, no solo por sus calles... Sus verduras, su restauración, sus vinos, sus costumbres, también, y especialmente por sus gentes. En Tudela amamos nuestras tradiciones, sean simples o complejas, y cuando haces tuya una costumbre, da igual, quien seas o de donde vengas. Esto que parece tan sencillo, hay quien no lo entiende y piensa que eso se puede erradicar, o peor, que se puede sustituir. Todavía hay quien opina que es bueno “adoctrinar”.
No se si voy a poder disfrutar de las fiestas, pero tengo la seguridad de que serán extraordinarias. Este 2019 saldrá al aire un cohete que lleva la ilusión de los tudelanos de toda la vida, tanto jóvenes como mayores. Solo hay que ver como andan las ‘redes’ para darse cuenta de que no hace falta un programa pleno de actos, ni un gasto desproporcionado... Sólo es necesario “entender” Tudela y a los Tudelanos. ¡Por cierto! Es muy importante tratar con mimo y respeto a los muchos riberos que se sienten tan tudelanos como nosotros. ¡Felices Fiestas!
