Ya está otra vez aquí la Navidad. Esta frase de múltiples interpretaciones: deseos, sentimientos, ilusión, rechazo.
¡Depende de tantas cosas: Estado de ánimo, soledad, la familia, circunstancias positivas o negativas. El nacimiento de una nueva personita, la pérdida de un ser querido, tener o no tener trabajo. Tener techo y comida o no tener nada. Estar sano o enfermo, solo o acompañado, etc.
El mundo está en plena convulsión y puede explotar por cualquier lado.
Nuestro país para unos va bien, para otros como siempre, y para los más mal. Pero esos son grandes temas que nos quedan lejos de nuestro alcance para poder solucionarlos personalmente.
Lo que deberíamos es reflexionar sobre lo más próximo, y valorar si lo que realmente tenemos y queremos tener es para vivir dignamente, o para tener más que al que envidiamos.
"Deberíamos reflexionar si lo que real-mente tenemos es para vivir dignamente
o para tener más que al que envidiamos... Nos sentiríamos mejor compartiendo"
¿Cuáles son nuestras necesidades reales? ¿Cuántas cosas inútiles somos capaces de comprar en esta Navidad: comida, dulces, bebidas, regalos, excesos, despilfarros?
¿Cuánto dinero, en muchas ocasiones del que no se tiene, gastaremos innecesariamente? Papa Noel, amigo invisible, Reyes, cenas de empresa, Nochevieja… y en enero las rebajas. ¡Qué pasada!
Lamentablemente habrá muchas familias que dirán: ¡ojalá podría yo hacer eso! Pero otras muchas también, saben de lo que escribo.
La gran desigualdad social, no sólo en Navidad, sino durante todo el año, nos debería remover la conciencia, no como responsables, los culpables todos sabemos quiénes son, sino como voceros en tiempos de silencio y comunicados por plasma.
Deberíamos ser capaces de quitar una pequeña parte de ese “despilfarro” para compartir con el que realmente lo necesita,
quizás nos sentiríamos mejor al desear “tener“ una Feliz Navidad.
¡Feliz Navidad y solidario año 2017!
José Luis Ultra Arellano
Tudelano
