Opinión

Tenemos ganas

Somos paisaje y paisanaje común, fruto de siglos de historia y cambio. Somos el resultado generacional de los que no se arrugaron ante el tórrido sol del verano, la opulencia de nuestros ríos, o la inabarcable extensión de las terrazas y llanuras fluviales, y que con su tenaz esfuerzo supieron aprovecharlos para entregarnos una fértil vega, generosa en frutos que nos diferencian y nos identifican. Somos los descendientes de quienes decidieron apostar por nuestro futuro invirtiendo buena parte de sus recursos en las grandes y pequeñas infraestructuras que hoy modelan el territorio y le dan soporte. De los que tuvieron audacia para ser los primeros en incorporar los cambios en el campo, de la maquinaria agrícola a la selección de semillas y plantas, y en la industria, de la fabricación del azúcar a las conservas vegetales o la cuarta gama. Herederos de los heterodoxos que se atrevieron a crear e inventar y de los que fueron capaces de conservar su obra material e inmaterial.

Somos gente abierta, franca y hospitalaria. Acogemos a los que llegan, a los que pasan y a los que se quedan, nos mezclamos rápidamente con todos, huimos de la endogamia y estamos orgullosos de tener una cultura mestiza, entendiendo que el Ebro y sus afluentes han dado a esta tierra esa ventajosa posibilidad de acceso y asentamiento de pueblos y culturas diversas. También somos socarrones, un tanto exagerados, algo presuntuosos y bastante tozudos. Pero sobre todo somos alegres, generosos y apasionados, ávidos de compartir vivencias y amistad, dispuestos siempre a darnos la mano.

"Tenemos el territorio y el carácter, somos apasionados... vale de victimismo”

La crisis de estos últimos años nos ha golpeado fuerte. Sabemos qué hicimos mal y cómo, y no queremos volver a repetirlo. Hemos aprendido que ignorar la realidad e ignorarnos nos debilita, que echar la culpa de todo a Pamplona o significarnos en el victimismo no sirve de nada, que el amiguismo sólo sirvió en los años de bonanza a unos pocos y perjudicó a la mayoría. Hemos decidido solucionar esto nosotros mismos.

Tenemos recursos, paisaje y paisanaje, contamos con una Estrategia común, sabemos que unidos somos fuertes, que la cooperación es el camino a seguir. Vamos a poner en valor lo que tenemos, aprovechando todas las oportunidades. Somos capaces de innovar y reinventarnos porque queremos salir fortalecidos y garantizar un futuro a los que nos sucedan. Tenemos el territorio, el carácter grabado en los genes y, sobre todo, tenemos ganas.