Por amor a su pueblo, y como de expresión para hacer más llevadera la pandemia. Así ha nacido ‘Habanera Sádaba’, una composición cuya autoría es de Antonio Naranjo ‘Leo’, al que se han sumado un grupo de sadabenses que han hecho de la música su válvula de escape a los tiempos de confinamiento.
Leo es el actual director de la banda de música de la localidad y, el resto de los participantes, todos ellos llevan la música en las venas, por ser joteros, músicos de la banda o componentes del coro, así como “amantes de la música”, como se declara el músico y técnico de sonido que ha hecho posible la grabación, Nacho Luna, en un improvisado estudio de grabación que el propio Leo ha montado en su casa: Study men. Así lo ha llamado.
Nombres propios de un pueblo que han puesto las voces a la habanera, María Pilar Álvarez, Estefanía Gil-Sola, Antonio Acín y Jesús Zalba y David Cay, que ha cambiado su bandurria por acompañar con su voz al resto de artistas. El propio Leo y Nacho también han contribuido a las armonías vocales.
La ‘Habanera Sádaba’ resume en unos compases el amor que estos sadabenses tienen a su pueblo, “es una pieza por y para los vecinos”, reconoce Leo.
Por ello, se estrenó en el canal de Youtube del artista por el día de San Valentín, “el día del amor”, señala.
Bonita presentación
Para su estreno, se ha montado un vídeo ilustrado por las imágenes que toma otro vecino del municipio: Javier Martínez ‘el Brujo’. En el vídeo se muestran los bellos rincones de la localidad, acompañando a la música y la letra en la que se destacan algunos de ellos, y, sobre todo, se cita al carácter amable y con un punto artístico de los vecinos de la localidad.
La idea de hacer esta composición “me surgió hace tiempo, más de un año”, indica Leo Naranjo. Poco a poco “fue tomando forma”, hasta que la hemos podido grabar, “aunque con las limitaciones que marca la pandemia”, puntualiza el músico.
Se trata de una composición “pegadiza”, como señala su autor, en la que queda patente el ritmo cubano, aunque en vez de citar el Malecón de Cuba, se cita la iglesia, el castillo y el Cristo Marinero de Sádaba.
El resultado: “un tributo al pueblo en el que vivimos y que todos amamos, un pueblo que hemos sabido apreciar mucho más cuando hemos estado confinados”, apunta el músico.
Ahora, “el mejor premio que podemos tener es que a los sadabenses les guste, que se la aprendan y la recuerden: quizá podemos cantarla cuando juntos cuando todo esto pase”, concluye Leo Naranjo.
