A finales de verano, Gurelur ha tenido conocimiento de la concesión de permisos para matar cinco ejemplares de tejón europeo (Meles meles) en la periferia de un establecimiento hotelero y en plena Selva del Irati, espacio natural protegido como Red Natura 2000: La asociación cuestiona qué dirán los visitantes de tan singular espacio cuando acudan a contemplar un bosque señero donde se están matando a sus especies salvajes protegidas y se pregunta si es esa la imagen de Navarra como Reyno y Tierra de Biodiversidad que queremos transmitir ante el turismo local y foráneo.
Las autorizaciones públicas (Resolución 47/2020 y Resolución 49/2020) contemplan el abatimiento arbitrario no selectivo y mediante métodos prohibidos de tejones. Este mustélido es el mayor carnívoro terrestre con presencia permanente en Navarra, se trata de un animal salvaje de indudable valor científico, ecológico y cultural y además, es una especie protegida en España por el Convenio Internacional de Berna desde 1986, y por nuestra normativa foral. Esta nueva atrocidad contra la población de una especie protegida proviene de la reclamación de un agricultor por las incidencias causadas en un maizal de Orbaizeta, cuyo propietario es el autorizado a matar a los tejones, y de la implantación fallida de métodos de control no letal y de prevención sobre los cultivos por parte de personal de la administración (tanto como Guarderío como personal del Servicio de Biodiversidad del Gobierno Navarro).
“Nos sorprende la ineficiencia y sobre todo, la arbitrariedad sectorial en la justificación de la adopción de medidas desproporcionadas que inciden negativamente sobre especies protegidas. Para más inri, es público y notorio, que la persona autorizada a matar tejones, ha percibido en los dos últimos años más de 41.816,92€ de fondos agroambientales públicos de la PAC para compatibilizar la explotación agrícola del territorio con la conservación de la biodiversidad, entre la cual figura precisamente, especies como el tejón”, han denunciado.
De una visita in situ efectuada por especialistas en fauna salvaje, se ha podido verificar la falta de medidas preventivas para evitar que estos animales accedan al cultivo, con un pastor eléctrico no funcional, y que la incidencia del tejón sobre el maíz observada en términos globales es irrelevante e insignificante.
Gurelur hace un llamamiento público para que la ciudadanía se movilice ante estos hechos y también nos preguntamos cómo responsables públicos del Gobierno de Navarra no hayan sido capaces de tener soluciones más imaginativas, no letales y exigir la implantación efectiva de medidas preventivas eficientes. En cambio han autorizado la matanza de tejones.
En una carta de los Comisarios de Medio Ambiente y Agricultura, dirigida a todos los ministros de Agricultura y Medio Ambiente de la Unión Europea, incluida España, recriminan la conducta de aquellos organismos públicos que hayan apostado por la vía fácil del control poblacional de animales salvajes como depredadores utilizando como pretexto la conflictividad de la especie por las presiones de sectores privados (recordemos que están subvencionados con dinero público para realizar sus prácticas de forma más respetuosa con el medio ambiente) en vez de apostar por la prevención como la herramienta prioritaria de gestión. Gurelur pregunta qué entienden desde el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente.
Gurelur no tenía conocimiento de que estas execrables autorizaciones se estuviesen emitiendo en nuestra Comunidad, motivo por el cual, además de cursar los Recursos de Alzada, también ha realizado varias peticiones de información para tener conocimiento de todas las muertes de tejones que han sido autorizadas por la Consejería de Medio Ambiente en los últimos años.
En el caso de que el recurso no sea estimado, Gurelur recurrirá ante los tribunales para que se depuren responsabilidades administrativas y evitar que estas atrocidades se vuelvan a cometer por personal anclado en otros tiempos.
