Los alfareños vivieron en la noche de este lunes un momento para su pequeña historia, la desacralización del templo del monasterio de la Purísima Concepción. En una emocionante última eucaristía, cientos de alfareños participaron de uno de los últimos pasos para la marcha de la comunidad de las hermanas concepcionistas franciscanas, que conlleva la venta del monasterio al Ayuntamiento por 1.485.000 euros.
La avanzada edad de la mayoría de las hermanas y la falta de relevo generacional les llevaba hace un año a la decisión de marchar del monasterio que les acoge desde hace cuatro siglos en busca de cercanía a servicios de asistencia y de una vida en comunidad más rica. Ese destino será la comunidad de Madre de Dios en Logroño.
Tras la decisión de vender el monasterio al Ayuntamiento, que le dará usos culturales y turísticos, debían darse pasos como el que se vivió este lunes. En la última eucaristía en el templo, el párroco Javier Martín leyó el decreto del obispo de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Carlos Escribano, por el que retiraba la dedicación al culto de la iglesia de la Concepción para destinarla a algo profano. “Considerando la venta, observando las disposiciones canónicas, considerando que no es imprescindible por existir otras iglesias, tomando que tendrá un uso profano digno, que no atentará a su anterior uso y que no existe riesgo de escándalo, este templo no y es ya lugar sagrado”, leyó desde el documento. Tras esa lectura, el párroco retiró el ara de uno de los altares, escenificando así que deja de ser lugar consagrado.
Tras la eucaristía, decenas de alfareños se acercaron a saludar a las hermanas concepcionistas, que tenían prevista para esta semana su marcha, tras la firma con el Ayuntamiento de la escritura de compra-venta del inmueble.
