Opinión

La escuela está bien; lo que está mal es la educación

Esta historia real, que sucedió hace unos años. Era una mujer de la limpieza, inmigrante, venida de Rumanía, más exactamente de Moldavia. Llevaba años trabajando en el servicio doméstico, pero nunca había traído con ella a sus hijos.

Le preguntamos la razón, considerando que nuestra sanidad y nuestra educación posiblemente fuesen mucho mejores. Así nos respondió:



“La sanidad es mucho mejor aquí, pero no la educación. Las escuelas están muy bien, con comedor y todo, pero no quiero que mis hijos aprendan aquí. Prefiero que vivan con sus abuelos en Moldavia. Allí los niños maduran antes, son más autónomos y están mejor educados. Aquí tratan mal al servicio doméstico, lo que no extraña porque también son desconsiderados con los mayores, con los profesores y hasta con sus padres. Los niños españoles son unos mimados caprichosos, no saben hacer nada en la casa, y siguen siendo unos niños a los veinte o treinta años. Esperan que les sirvan todo, no recogen su ropa y no cuidan de nadie, ni de ellos mismos. Además, fuman y beben desde muy pronto. Yo no quiero que mis hijos sean así”. Impresionante análisis de una mujer observadora de nuestra sociedad, que nos obliga a reflexionar.