Un informe de la UPNA presentado a la Comisión de Fraude Fiscal de Navarra, cuantifica en 848€ lo que le cuestan cada año a cada ciudadano los incumplimientos de sus vecinos en materia de impuestos.
El estudio cifra en el 15,3% el promedio de economía sumergida entre 1986 y 2016, ¡casi nada!
Ello, sumado a la ingente cantidad de gasto innecesario que arrastran las diferentes Administraciones, demuestra una vez más que esa lacra frena economías y que bien se podrían rebajar los impuestos si los ‘escaqueadores’ fueran más solidarios y se gestionara todo con mayor rigor.
Los servicios podrían mejorarse y resolver problemas como la financiación de la Educación, la Sanidad y las Pensiones.
