Agentes de la Policía Foral, adscritos a la División de Seguridad Ciudadana, han detenido recientemente a dos varones en Berriozar y Tudela como autores de dos presuntos delitos contra la salud pública.
El primero es un vecino de Tudela de 29 años y con antecedentes relacionados. Una patrulla dio el alto reglamentario al conductor de un vehículo, que haciendo caso omiso a las indicaciones, se dio a la fuga iniciando una persecución por el casco urbano de la capital ribera. En su huida se saltó varios semáforos en rojo, no respetó tres señales de “stop”, atravesó dos rotondas en sentido inverso, obligó a varios usuarios a saltar a la acera para evitar ser arrollados cuando cruzaban por un paso de peatones, circuló en dirección contraria y golpeó a dos vehículos, uno de ellos el coche patrulla, obligando a otros a apartarse para evitar una colisión. Finalmente perdió el control del coche y se salió la vía por la que circulaba, golpeándose contra una verja.
Los agentes detuvieron al conductor por un presunto delito de conducción temeraria y desobediencia grave. En el registro del vehículo se localizaron una gran cantidad de pastillas rosáceas que se sospechó podrían ser sustancias estupefacientes destinadas a la venta. También se localizó en el exterior del coche una bolsa transparente con las mismas pastillas y otra bolsa con un polvo blanco en su interior, que presuntamente las arrojó ante la presencia policial.
El segundo detenido es un vecino de Pamplona de 52 años. Los policías observaron cómo el implicado establecía contacto con dos personas en el exterior de un bar de la localidad de Berriozar. Cuando se percató de la presencia policial se introdujo apresuradamente al interior del local. Ante las sospechas levantadas, la patrulla identificó al hombre, localizando entre sus pertenencias ocho bolsitas con una sustancia blanca en su interior, que indicó era “speed”. Además portaba 225€ en billetes fraccionados provenientes presuntamente del trapicheo. A la vista de las pruebas los policías forales detuvieron al varón como presunto autor de un delito contra la salud pública, siendo trasladado a dependencias policiales para continuar con las diligencias propias del atestado.
