Con el objetivo de conocer el diseño del poblamiento romano que alberga el término municipal de Castiliscar, acaba de ponerse en marcha un proyecto de prospección arqueológica que se desarrollará durante varias semanas de febrero (del 1 al 9) y también de marzo (del 3 al 7, previsiblemente).
Esta iniciativa surge tras el estudio de una inscripción romana aparecida en la zona de Collado de Malvar del municipio cincovillés. Esta inscripción, datada en la primera mitad del siglo I d. C., puede ahora puede verse en el Museo de Castiliscar.
Para los expertos que están llevando a cabo la iniciativa, Javier Andreu, que lo dirige, Lorena Marín y Leticia Tobalina, una de las hipótesis es que este espacio fue gestionado en época romana como parte del territorio rural de la ciudad romana de Los Bañales.
A este equipo investigador se unirán alumnos del diploma de arqueología de la Universidad de Navarra que acudirán al espacio durante los fines de semana que dure el proyecto.
Para la detección de los posibles emplazamientos se realizará una georreferenciación y delimitación de los yacimientos ya conocidos, situados en las zonas de Collado de Malvar, Somavilla, San Román, La Estanca, entre otros.
También se llevará a cabo un estudio sistemático de todo el territorio para trazar un esquema de articulación de este en época romana y para estudiar los patrones de poblamiento en la zona.
“Se da continuidad así al trabajo que, desde 2009, viene desarrollando en el que fuera el territorio rural de Los Bañales el equipo de la Fundación Uncastillo y que en años anteriores ya prospectó los términos municipales de Sádaba, Biota, Layana y Uncastillo”, señala el director de la iniciativa, Javier Andreu.
Método novedoso
La actuación empleará una metodología novedosa, que dirigirá Leticia Tobalina, de la Universidad de Navarra, y en la que colaborarán los estudiantes antes mencionados.
Se trata de una metodología de georreferenciación del material que aparezca en superficie y que permitirá, además, trazar un estudio detallado de la extensión y las funciones de cada yacimiento arqueológico.
Para ello, entre otros elementos, se irán analizando las piezas cerámicas encontradas que permitirán conocer el uso del espacio (residencial, almacenaje, etc.). “Esto garantizará, también, el impacto de los resultados, por el nuevo enfoque metodológico”, puntualiza Andreu.
Esta propuesta cuenta con la financiación del Ayuntamiento de Castiliscar, en colaboración con la Fundación Laboral de la Construcción.
Además, colabora la Fundación Uncastillo y la Comarca de las Cinco Villas, entidad que se encargará de las labores de difusión de este proyecto, que cuenta con la autorización de la Dirección General de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón.
Por el momento, y tras dos días de trabajo, las prospecciones van arrojando algunos datos interesantes. Así, “en la zona de la Estanca se han encontrado unos muros singulares que pueden ser un enclave en el que excavar en un futuro”, precisa Javier Andreu. Además, se puede apreciar “un tramo de la vía romana, uno de los pocos conservados y documentados en toda la comarca”, reconoce el arqueólogo.
También en la zona de Somavilla hay unas cimentaciones conocidas desde antiguo que ahora se van a examinar tras las labores de desbroce realizadas en la zona. “Las documentaremos con la utilización de un dron el fin de semana”, puntualiza el experto.
Javier Andreu recuerda “la novedad” de este proyecto, ya que esta zona no cuenta con casi documentación sobre la misma. “Ahora estamos siguiendo el inventario que llevó a cabo la arqueóloga Peña Lanzarote en los años 90”, indica. Un mundo de secretos que permitirán redescubrir el pasado romano de Castiliscar.
