Tarazona

La actuación de dos policías salva la vida de siete personas en un incendio

Los dos agentes de la policía local controlaron la situación hasta la llegada de los Bomberos y de la Guardia Civil.

El incendio ayer de una cocina en un piso situado en el número 44 del Paseo de los Fueros de Aragón pudo acabar en tragedia si no hubiera sido por la rápida actuación de dos agentes de la Policía Local de Tarazona que pusieron en riesgo su propia integridad física.

Todo comenzó en torno a las 18:30h. de la tarde, cuando la centralita de policía recibió un aviso del 112 advirtiendo del incendio. Inmediatamente se personaron en el lugar del siniestro los dos agentes citados, uno de los cuales subió inmediatamente a comprobar lo que ocurría: en uno de los pisos del bloque se había iniciado un incendio en la cocina que aún permanecía activo y cuyo humo había empezado a extenderse por todo el bloque. En dicha vivienda había dos personas. Un hombre, que resultó ileso, y una mujer con leves signos de intoxicación por humo. Ambos, al llegar los agentes, ya habían abandonado el edificio y se encontraban en la calle.

Mientras un agente comprobaba la gravedad de lo que estaba ocurriendo, el otro subió al foco del incendio con el extintor que forma parte del equipamiento habitual del vehículo policial y extinguió las llamas. Acto seguido, al comprobar el que humo estaba inundando el resto del edificio, subió por las escaleras de todo el bloque con el ánimo de avisar a los vecinos para que desalojasen el edificio. 

En el tercer piso, un varón se encontraba en compañía de tres de sus nietas, de 17 y 6 años (gemelas). Uno de los agentes, atravesando una ya intensa nube de humo cogió en brazos a una de las niñas de seis años y bajando así por las escaleras la sacó rápidamente del edificio. El otro ayudó y acompañó al hombre y a sus otras dos nietas también fuera del lugar del incendio y las puso a salvo. 

Pero aún quedaba alguien más. Dos mujeres se encontraban en otra de las viviendas, por lo que los agentes tuvieron que volver a actuar. Llegaron hasta donde se encontraban estas dos personas (un piso del que durante la llamada al desalojo no se había tenido respuesta) y consiguieron que les abriesen la puerta. Allí se encontraban con la vivienda llena de humo y una de las dos mujeres presentaba dificultades para respirar. Tanto es así, que no encontraron conveniente evacuarla en ese momento, por lo que decidieron cerrar la puerta y asistirla preventivamente con una toalla totalmente mojada con agua con la que cubrir las vías respiratorias hasta esperar la llegada de los bomberos. Cuando llegaron, accedieron a la vivienda y asistieron a la herida mediante una máscara de oxígeno, antes de evacuarla. 

Finalmente, tras inspeccionar el edificio y comprobar que todos los afectados estaban a salvo, los bomberos decidieron permitir de nuevo la entrada al edificio a los vecinos, a excepción de los del piso donde tuvo lugar el incendio a la espera de una revisión de la instalación eléctrica por parte de un profesional.

Los dos agentes de la Policía Local, debido a la gran inhalación de humo, padecieron una irritación de las vías respiratorias y cierto malestar físico, pero no requirieron atención médica y continuaron su turno con normalidad.