San Valentín

5 sorpresas gastronómicas para San Valentín

Hoy es San Valentín, el Día de los Enamorados. Y si bien está la posibilidad de adquirir un obsequio con el que agasajar a la pareja, no todo tiene que ser comprar. Si de verdad se quiere sorprenderla, se puede preparar un regalo gastronómico que contenga platos distintos a los habituales. 

Bolitas de queso camembert
photo_camera Bolitas de queso camembert

Para que no falten ideas, a continuación se expone un menú a base de entrantes y un postre fácil que puede servir tanto para San Valentín, como para cualquier otro día que apetezca celebrar el amor.

Bolitas de queso Camembert con cereales

Para comenzar se pueden hacer unos entremeses de queso Camembert, un queso suave que, combinando con unos kikos (maíz tostado) y unos cereales, tendrá un toque crujiente. A su vez, a esta combinación se le puede dar un contrapunto dulce con unos hilitos de mermelada de arándanos.

Se mezcla el queso Camembert con queso para untar; la proporción dependerá de si se prefiere más el sabor de uno u otro queso. Se guarda una hora en la nevera hasta que la mezcla endurezca un poco. Mientras, en un vaso de batidora se colocan los maíces o kikos y los cereales de desayuno caramelizados, para triturarlos hasta conseguir una mezcla crocante. Con unas cucharillas se hacen bolitas de queso que habrá que rebozar por la mezcla crocante de kikos y cereales. Se pinchan unas brochetas para que sea más fácil de coger las bolitas y ¡listo! Ya está un sencillo aperitivo y muy lucido.

Tostitas de maíz con hummus de aguacate y gambas

Se puede tener preparado un dipeo con alimentos sanos, baratos y sofisticados. Por ejemplo, un hummus de aguacate con un toque de gambas.

Se escurren 100 gramos de garbanzos del jugo de la conserva y se introducen en un vaso de batidora junto con la carne de un par de aguacates, un diente de ajo, una cucharilla de semillas de sésamo ligeramente tostadas, una cucharada de salsa tahini, una cucharada de zumo de lima y el aceite de oliva.

Se tritura todo hasta conseguir una crema fina y brillante, que se espolvorea con pimentón y una pizca de pimienta y de cilantro. Se pone a punto de sal y se sirve con unas tostitas de maíz. Se decoran con unas colitas de gambas cocidas y peladas.

Mejillones al vapor con verduritas aliñadas

Para que el picoteo sea ligero pero a la vez nutritivo, se pueden introducir unos mejillones cocinados al vapor y en forma de salpicón. Además, al marisco se le atribuyen propiedades afrodisiacas, así que habrá que probar, ¿no?

Primero hay que cocinar 300 g de mejillones al vapor y, según se abren, retirarlos de la cazuela, sacar su carne y reservar enteros. Después, se cuela el agua que han soltado los mejillones y también se reserva. A continuación, se prepara una salsa con unas cuatro cucharadas de mayonesa ligera y se añaden cuatro cucharadas de salsa de tomate muy fina y unas cucharadas del agua de cocción de los mejillones. Esta salsa rosa se reserva en el frigorífico.

mejores-tapas-hd

Se trocean de manera muy fina las verduras de condimentación (un trocito de cebolleta fresca, un diente de ajo, un pimiento verde y un tomate fresco), se mezclan y se aliñan con aceite de oliva y vinagre de sidra. Y esta maceración de verduras aliñadas se deja en el frigorífico durante 20 minutos.

Para servir, se coloca en cucharillas de servicio (o en las propias conchas de los mejillones) una cucharadita de la salsa rosa y el agua de mejillones. Sobre ella se pone el mejillón y se decora con las verduras troceadas y aliñadas. Si gusta el picante, se puede agregar un toque de tabasco a la salsa o un toque de pimiento jalapeño a las verduras con la vinagreta. Hay que servirlo bien fresquito.

Tostas de hogaza con crema de atún y pimientos del piquillo

Otro picoteo muy sencillo y gustoso consiste en preparar un paté para untar en unas tostas. El secreto es que el paté sea muy ligero y casero, como el de atún con un toque picante de los pimientos del piquillo.

Para ello hay que escurrir 100 gramos de atún (puede ser de una conserva con aceite o de escabeche) y colocarlos en el bol de la batidora, junto con un par de pimientos del piquillo escurridos, 100 gramos de queso cremoso, unas gotas de zumo de limón y unas gotas de tabasco. También se debe agregar una gran cucharada de mayonesa ligera junto con una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. Se tritura todo hasta obtener una mezcla de consistencia homogénea que hay que colocar en un recipiente para servir en la mesa y poder picotear. Se sirve junto a unas tostas de hogaza, para untar.

Smoothie de fresas con yogur y leche de soja

El menú termina con unas fresas, en este caso, en forma de batido cremoso con yogur y leche de soja. Además de digestivo, es muy ligero, por lo que se podrá acabar la velada de una manera alegre y sin problemas de digestiones pesadas.

Antes de comenzar, hay que lavar 400 gramos de fresas, espolvorearlas con dos cucharadas de azúcar e introducirlas en el congelador durante un par de horas. En el momento de preparar el smoothie, se deben sacar las fresas del congelador, y un yogur y un gran vaso de leche de soja, del frigorífico.

Se mezclan el yogur natural y la leche de soja y se colocan en un vaso de batidora junto con las fresas heladas. Se tritura todo hasta conseguir una textura cremosa. Si se prefiere notar los trocitos de frutas, no habrá que triturar hasta el final para así poder evitar que se deshagan por completo. Se sirve al momento con unas pajitas y unos trocitos de fresas decorando junto con unas hojitas de hierbabuena.

refrescos-sin-azucar-alcohol-hd