El desdoblamiento de la N-232, en el aire

El Ministerio de Fomento, dentro de los recortes anunciados en los Presupuestos Generales del Estado, aplazará indefinidamente la construcción de obras como el desdoblamiento de la N-232 en Aragón y La Rioja. Los últimos cálculos hablaban de terminar ambos tramos hacia el año 2015, pero tras el anuncio del ministro esta fecha podría retrasarse varios años más.

El responsable de Fomento, José Blanco, señaló que "aplazaremos la construcción de nuevas autovías en corredores donde existen autopistas de peaje no saturadas". Esta medida la enmarcó dentro de un escenario en el que "hay que replantearse la futura política de infraestructuras de nuestro país. No se puede basar en la antigua dinámica de construir sin parar".

Blanco indicó, en una comparecencia en Madrid la pasada semana, que la planificación de infraestructuras está "por encima de las posibilidades que un país como España se puede permitir"

y añadió que "esta estrategia no es sostenible ni económica ni medioambientalmente", y que se ha de basar en "la política de aprovechar lo que ya tenemos y construir lo verdaderamente necesario".

La N-232 (futura A-68) a su paso por La Rioja y Aragón se enmarca precisamente en ese apartado, ya que cuenta con la autopista AP-68 paralela al trazado de la autovía en el tramo aragonés (hasta Zaragoza) y riojano.