Plumas al cierzo

Mis pupilas están fijas en Iris

Ángel Sáez García nos escribe este poema.

Mis pupilas están tan ocupadas,
Tan fijas en mi amada Iris y atentas,
De empezar a calmar su sed contentas,
Que ellas se ven al paraíso aupadas.

Mis pupilas están tan extasiadas
Contemplando su luz, que te alimentas,
Lector, tú también de ella y documentas
Que son una legión las admiradas.

Habrá quienes destaquen su sonrisa,
Amén de inmarchitable, inolvidable,
Como la que pintó a La Mona Lisa

Leonardo da Vinci, insobornable.
Y habrá quienes ponderen los calores
De su omnímodo abrazo o los colores.