Plumas al cierzo
Villancico de los dos pastores
12 de diciembre de 2018 (11:14 h.)
A Belem han llegado
dos pastorcilllos
para traerle leche
y miel al Niño.
El Niño los contempla,
los mira el Niño
y les pregunta de
dónde han venido.
Los pastores le dicen
que son amigos
de dos pueblos pequeños,
casi vecinos.
El Niño, que todito
lo curiosea,
pregunta por sus nombres
y el de su tierra.
-Yo me llamo Yaser,
soy palestino.
-Y yo me llamo Ariel
y soy judío.
El Niño no ve luces
en sus pupilas,
e indaga por la falta
de su alegría.
Le responden los niños
que han hecho un muro
que ha partido de golpe
en dos su mundo.
Y el Niño les responde
iros en paz
que ningún muro puede
con la amistad.
Dos pastores regresan
por un camino
y a sus ojos sin odio
ha vuelto el brillo.
Pepe Alfaro Calvo