En qué consiste Urania, el Congreso Navarro de Jóvenes Investigadores, organizado a principios de año en colaboración con otras entidades? ¿Qué aporta a la formación y progreso de nuestros jóvenes investigadores?
Urania es un experimento muy interesante y muy positivo porque no hay muchos sitios en los que se les motive a los jóvenes que están cursando el Bachiller a hacer investigación casi profesional. Entonces es una experiencia importante por lo que implica. Es también una tarea que se ha propuesto a UNED Tudela, con el IES Valle del Ebro, con la Comunidad de Bardenas Reales y el IES Navarro Villoslada.
Una cosa que no está en el currículum de forma explícita es “¿que harías tu si tendrías que investigar un problema o resolver una pregunta?”.
Entonces, lo que se les plantea a los alumnos es identificar un problema o una cuestión sin resolver, una pregunta que les haya surgido en sus vidas o el entorno y trabajarlo como si fuera un problema científico. Es decir, intentar ver cuál es el problema, buscar las fuentes que les digan cómo está la situación, investigar una posible solución, plantear un experimento, realizarlo y luego contárselo a los demás.
Urania cumple varios objetivos, uno de ellos es explicar a los alumnos que existe una actividad profesional que tiene que ver con la investigación científica y, segundo, les pone como de “mayores”, dándoles una especie de respaldo: “¿Tú qué harías con ese problema que, a lo mejor, tus mayores no saben cómo afrontarlo?, tú puedes aportar una visión distinta desde tu perspectiva”. Es bastante rompedor y me parece una idea muy potente y es una fuente de educación para científicos.
¿Cuándo será la siguiente edición?
No sabemos puesto que no depende de nosotros. Estamos ahí apoyando, pero depende de la coordinación que pueda orquestarse entre UNED Tudela y los institutos que son al fin y al cabo los que tienen que poner su programa académico.
Trabajan durante meses en este proyecto, los grupos se forman al principio del curso y luego al final se tiene que hacer una labor investigadora, experimentación, cuestionarios y redactar. Por lo tanto, dura varios meses y eso depende ya de la propia dinámica de los centros.
¿Qué otros programas, encuentros, citas, congresos, desarrollan en su Departamento en torno a la Educación, la Formación, la Investigación, la Innovación?
Tenemos dos líneas de actuación. Una es básicamente apoyar y fomentar lo que ya se está realizando normalmente en la sociedad civil, que es apoyarles con presupuesto cuando el programa merece la pena y, sobretodo, velar que cuando lo apoyamos, se cumplen una serie de requisitos mínimos, como puede ser, por ejemplo, que se cumplan o que estén de acuerdo los programas de estos encuentros con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU 2030 ó también que se cumplan requisitos de ser inclusivos, diversos y que respeten este tipo de derechos humanos.
Además de esto, nosotros tenemos nuestras propias iniciativas, que también están encaminadas siempre hacia lo mismo, fomentar que nuestros jóvenes entiendan que el conocimiento y la innovación es la parte probablemente más importante del futuro de nuestro país. Tenemos que transformar la sociedad gracias al conocimiento. Tenemos algunas ideas o actividades propias que hacemos en el departamento. Una de ellas es lo que llamamos Innovation Fridays, que es una especie de seminario online que hacemos una vez al mes, los viernes. Se hace literalmente desde mi despacho y una vez al mes planteamos temas como la innovación de la mujer en el mundo rural, cómo se consiguen becas universitarias, títulos de excelencia en investigación... Y eso se transmite online y la verdad es que está teniendo bastante éxito. Y otra cosa que hacemos de forma muy específica también es apoyar al programa Planeta STEM. Es un programa que se ofrece desde el Planetario de Pamplona y que afecta a todo el territorio y que tiene varias actividades. Por ejemplo, una actividad muy importante es para fomentar las vocaciones científicas en mujeres y niñas. Esta actividad se hace contando cursos hay buscamos referentes, científicas y tecnologas, que van a institutos a explicar qué hace la mujer en ciencia, por qué es relevante que no hay que perder el talento femenino para la ciencia y la tecnología. En general, también fomentar cualquier tipo de formación científica. Este año han participado 850 jóvenes navarros y navarras. Ha sido una actividad muy potente que tiene como misión básicamente fomentar las relaciones científicas y hacerlo de manera inclusiva, diversa y fácil. Tenemos programas para niños de 10 a 14, de 14 a 16 años, algunos van más abajo y van desde los 8 años y los 10 años, y a veces les pedimos que vengan hasta con sus padres y abuelos a participar en este tipo de actividades. Por ejemplo, esta semana pasada organizamos una semana de programación para niños entre 7 y 14 años para que aprendieran a programar una aplicación de teléfono móvil sobre fenómenos meteorológicos. Una chica presentó un programa sobre cómo hacer una app que le avisa cuando tiene que regar las plantas dependiendo del tiempo que ha hecho en su ciudad.
Hay un montón de actividades que se llevan a cabo y que, probablemente, no están en ningún lugar. Falta todavía más divulgación para que la juventud entienda que el futuro de la sociedad depende mucho de la ciencia.
Hablando ya más de su área de responsabilidad más directa: ¿Qué aportan las diferentes Universidades de Navarra a nuestra sociedad y al conjunto de sus estudiantes? ¿Cómo se enlaza con las universidades?
Nosotros como Gobierno tenemos la responsibilidad de financiar obviamente, por Comunidad Autónoma, la Universidad Pública de Navarra y tenemos que poner en valor que Navarra es un territorio claramente universitario. Para que os hagáis una idea, Navarra, en las dos universidades que son físicamente presenciales al final hay veinte mil estudiantes que vienen a hacer su carrera universitaria a Navarra y además es un número, la inmensa mayoría obviamente son navarros, pero cada vez somos capaces de traer talento de otras comunidades autónomas y otros países.
En la Universidad Pública de Navarra casi un 15% de los alumnos ya no proceden de Navarra, y en la Universidad de Navarra hay más de un 25% que tampoco proceden de aquí, con lo cual estamos consiguiendo que se perciba Navarra como un territorio donde la Universidad es de altísima calidad y donde los alumnos pueden venir aquí a estudiar y a formarse.
Recordemos que la capacidad de encontrar un trabajo después cuando se alcanzan formaciones de grado de FP Superior o universitarios, estamos hablando de una empleabilidad del 90%. Por lo tanto, venir a Navarra a estudiar supone una mayor facilidad para encontrar trabajo es una realidad soportada con datos. Luego, además, tenemos dos centros de la UNED, que son los de Pamplona y Tudela, y cada uno tiene unas peculiaridades diferentes y están muy bien aceptados, tienen decenas de miles de alumnos en su capacidad de cursillos y de conferencias y de actividades propias de la universidad. Y luego además tenemos la UNED de Tudela que aparte de todo esto, es una gran catalizadora de la formación no presencial, ya que tiene experimentos especiales como el centro tecnológico que se llama QInnova, que es un centro especializado en desarrollar software para la gestión de red según modelos de calidad.
Es un centro único en España que también trae a Tudela a mucha gente interesada en la implantación de sistemas y desarrollos. Por lo tanto, Navarra es un territorio atractivo para los universitarios durante toda la época de su vida. En la época más convencional, de forma presencial; pero luego también en las épocas de todo tipo y otras edades, a través de la UNED.
Y en esta línea, ¿qué tiene que decir el Campus de la UPNA en Tudela, la niña pequeña siempre olvidada? ¿Qué le falta? ¿Están desarrollando algún nuevo proyecto para este espacio? ¿Cómo ve su evolución esta legislatura? ¿Y desde su implantación, cómo ve su evolución?
Estamos trabajando con el Grupo Motor de Tudela, que están realizando un trabajo bastante bueno a nivel académico y laboral. Es importante entender que en el Campus de Tudela, ahora mismo, se ofrecen bastantes cosas: un máster de dirección de empresa agroalimentaria, un título de experto en gestión de calidad... Tenemos ahora mismo todos los módulos completos de fisioterapia, ingeniería técnica industrial, mecánica, y diseño industrial. Por lo tanto, la oferta formativa es buena.
Es evidente que todo es mejorable, pero también es cierto que todos los Campus quieren crecer. Por lo tanto, nuestro deber es dimensionar su crecimiento en el futuro, dependiendo de las necesidades reales que tenga la sociedad que vive alrededor. Por lo tanto, hay que entender que la oferta tiene que ser generosa, pero es cierto que tampoco podemos crear grados que no se concreten. Por lo tanto, es interesantísimo estudiar mejor el ambiente y seguir trabajando en ello. Nunca se me ha podido decir que no he estudiado el Campus de Tudela con cariño y buscando siempre aportar más valor ahí.
Acerca de la inversión, quiero poner en valor que en mi Departamento el año pasado tuvimos un presupuesto de 85 millones de euros. Es un presupuesto que sería la envidia para una Universidad Pública y para todo lo que se desarrolla alrededor de esa Universidad Pública, es decir: personal, infraestructuras, inversiones, apoyo a los investigadores, becarios de grado, de máster, doctorales y casi dos millones para los centros en la red en Navarra. Por lo tanto, la apuesta del Gobierno es muy generosa y es importante que se vea la Universidad como un elemento de ascensor social y de cambio transformador.
Ahora en septiembre, como ocurre a principio de año, es el momento de la vuelta a la rutina y a los buenos propósitos como mejorar nuestros conocimientos… ¿Porqué debemos formarnos permanentemente los adultos ahora?
Yo creo que nuestra capacidad no cambia y siempre está la necesidad de adecuarnos a nuestro entorno. Necesitamos utilizar herramientas digitales que hace cinco años ni siquiera existían y cambia nuestra forma de trabajar. Por lo tanto, es importante ofrecer este tipo de formación de manera accesible. Hay una iniciativa entre la UNED de Tudela y la Universidad Pública de Navarra para facilitar la formación a la gente mayor, gente que habitualmente no ha tenido acceso ni oportunidad de realizar formación en medios digitales.
El año pasado se lanzó un programa en la UNED de Tudela que ahora se ha puesto online y es muy accesible con más de veinte cursos donde se enseña a la gente mayor desde utilizar el WhatsApp hasta pedir cita médica online. O sea, que es importantísimo. Estamos preparados a nivel de usuarios de la administración pública y de nuestro entorno de las entidades bancarias para tomar ciertas decisiones que nos den independencia digital. Es importante que seamos conscientes de que probablemente el trabajo que hagamos ahora va a tener un componente digital que va a ir creciendo poco a poco, y es importante que estemos preparados.
En ese aspecto, vamos presentar pronto el Plan de Inclusión y Capacitación Digital de Navarra, en el que atendemos estas dos áreas, por un lado, la necesidad laboral de digitalización y, por otro, intentar que ningún grupo que esté en riesgo de exclusión social no esté lejos de este tipo de inclusión digital. Lo que tenemos que combatir es que la conexión digital no es una opción: el mundo está cambiando, cada vez hay más trabajo digital y por lo tanto es importante que estemos preparados.
En ese sentido, además de la transformación digital, ¿la Innovación por qué es tan importante para la cabecera de Gobierno como para tener una Consejería?
Hay gente que no tiene bien identificado el concepto de Innovación. Todo el mundo sabe que la ciencia supone investigar y aumentar el conocimiento. Mejorar cosas, mejorar procesos, inventar un sistema mejor para recuperar más energía, etc. La innovación consiste en utilizar ese tipo de conocimiento y hacer que llegue a la sociedad o a la industria. Por lo tanto, innovar es cualquier aportación de valor que tenga base o conocimiento. Si la ciencia y la tecnología se quedan en sus vertientes habituales, en la Universidad o en aspectos de investigación, la sociedad tardará mucho en beneficiarse.
En España, en general tenemos muy buenos científicos, pero nos falta camino que recorrer todavía en materia de innovación, que es hacer llegar esto a la industria y a la sociedad civil en general. Por lo tanto, nuestro Departamento, una de las tareas que realiza, es básicamente identificar todos los avances que se van produciendo en las universidades, en los centros tecnológicos o en las áreas de investigación, y darles un empujón para que realmente se transformen en elementos innovadores que modifiquen actividades industriales: la forma en la que se decida los recursos hídricos de una plantación para que la lechuga esté en su justo punto cuando se recoge, para que se identifiquen plagas, para que los algoritmos de inteligencia artificial predigan mejor que antes la ruta de un autobús para que recoja más gente con el menor gasto energético posible. Todo ese tipo de procesos que supone coger la ciencia y llevarla a la sociedad civil o a las empresas, eso es lo que es Innovación. En este sentido, el Departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital ha puesto en marcha el denominado Sistema Navarro de I+D+i (SINAI) para impulsar lo que hace y lo que puede aportar este tipo de actividad que es fundamental, la Innovación.
¿Pueden acceder a ese sistema las Pymes?
Ahí tenemos varias líneas de actuación. Para las empresas que tienen un tamaño mediano y grande, lanzamos durante la pandemia, en marzo de 2020, un tipo de organización que cualquier empresa puede apuntarse e implementarlo ellas mismas: las unidades de innovación de I+D+i empresarial. Esto significa que una empresa que hace Innovación ahora mismo utiliza sus recursos de la forma que conviene, pero al idenficarse como una unidad le va a permitir entrar al SINAI en igualdad de condiciones con cualquier Universidad, concurrir a convocatorias de fondos en forma de subvenciones, contratos relacionados con la innovación, les supone una desgravación fiscal del 50% de todo lo que inviertan en sanidad que también afecta a los contratos de la gente que trabajan allí. Por lo tanto, estamos generando una cultura de que las empresas realmente tienen que apostar por la innovación y hacerlo, aún no teniendo el tamaño adecuado, con una unidad de innovación en I+D+i empresarial dentro de la empresa. Y aunque es cierto que las Pymes no tienen el tamaño suficiente para hacer este tipo de cosas, hemos conseguido que el mensaje de que hay que incorporar tecnología y doctores a las empresas pequeñas, sea cada vez más conocido y haya calado más en el tejido empresarial. De hecho, este año en la convocatoria que tenemos anual para incorporar tecnólogos, -es decir, personas con una muy buena formación superior FP o una carrera, para que se incorporen a esas empresas y aporten su valor-, por primera vez han sido más pymes las que se han beneficiado de esta convocatoria que tradicionalmente se colocaban y apuntaba gente de grandes empresas. Es decir, estamos consiguiendo que la Pyme entienda que aportar conocimiento le va a aportar a la empresa valor a pesar de ser un modelo que no es inmediato. Por lo tanto, efectivamente las Pymes están cambiando y una cosa que pueden hacer, siempre, es pedir un crédito de este tipo, un contrato de tecnólogo para su propia empresa porque de verdad le va a cambiar su forma de trabajar.
¿La tan mencionada “Transformación Digital”, en qué consiste? ¿Cómo nos afecta? ¿Cómo nos va a llegar o nos está llegando? ¿Cómo están trabajando para implantarla y que se desarrolle? ¿Con qué planes cuentan al respecto?
Tenemos que hacer una transformación digital de verdad, es una cosa que nos va a afectar a todos y que cada uno tiene que transformar digitalmente desde el punto en el que se encuentra.
No podemos convertirnos todos en programadores de informática, si no que tenemos que integrar la transformación en el entorno que nos rodea y para eso hacen falta herramientas. Es importante trabajar en la inclusión digital, nadie puede quedarse fuera. Navarra no tiene playa ni tiene una gran extensión. El futuro de Navarra depende de que la industria admita que la Innovación es lo más importante puesto que podemos competir en innovación y en conocimiento, que hay mucho.
Si nuestra Industria, que es muy potente, incorpora la innovación como elemento transformador, problablemente seamos de las regiones mejor explotadas de Europa para el futuro.
¿La Covid-19 ha precipitado que estas áreas se estén atendiendo más?
Sí. Por ejemplo, en el área de la investigación biomédica lanzamos una convocatoria especial para investigaciones orientadas a luchar contra la pandemia que además ha puesto en valor que esta inversión que hemos realizado es lo que nos ha sacado de donde estamos.
La pandemia nos está haciendo entender que no puede ser que el futuro de Europa dependa de unos chips que se fabrican en Asia. No quiero que todo se haga en Europa, pero algo tenemos que tener propio, que nos pueda sacar de un determinado problema.
Se ha puesto aquí el dedo en el mapa en materia de innovación para nuestro futuro, sin duda.
