Tudela

Carlos Sobera: "Siempre recordaré al Tudelano cabreado"

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Sólo cinco minutos bastan para comprobar en primera persona que el 'salero' de Carlos Sobera es cosa natural. Tirando de su genuino acento vizcaíno, pese a desempeñar casi toda su labor profesional en Madrid, el presentador televisivo y actor se deja querer y agradece la invitación para visitar Tudela.

¿Es la primera vez que está en Tudela? ¿Conocía algo de la ciudad antes de venir?

Efectivamente, es la primera vez y debo confesarlo. De Tudela, y también de Navarra, conocía lo más básico: que es tierra de buenísimas verduras y de muy buena gente. Eso se sabe incluso antes de venir.

¿Cómo de documentado se encuentra en lo que a conocimientos de verduras tudelanas se refiere?

Si soy sincero, a Tudela decidí venir con la expectativa de que el 'máster' en espárragos y alcachofas me lo impartiesen aquí mismo, para después poder ser un ideal embajador de las verduras, que es de lo que se trata. Aunque debo decir que, en el caso del espárrago de Navarra, soy un consumidor de la 'repera'.

¿Prefiere un chuletón y un vaso de sidra o un plato de verduras?

Mi radiografía no coincide precisamente con el lugar del que procedo (ríe). No soy mucho de chuletón y las verduras me gustan mucho. Desde hace dos años, cuando me diagnosticaron diabetes, la verdura forma parte de mi vida. Primero por prescripción y después por devoción.

Ahora toca promocionar Tudela en sus programas...

(Ríe). ¿Te imaginas que saliese con una txapela en la que se leyese 'Tudela'? Bueno, habrá que buscar como excusa algún concursante de Tudela, si es posible. Le diré a Rafael (presidente de la Orden del Volatín) que busque a alguien o que venga él mismo.

Ya tuvo la oportunidad, en su día, de conocer al Tudelano cabreado.

¡Es cierto! Eso fue en el '50x15'. Fue un fenómeno y lo recordaré toda la vida, siempre lo asocio con la forma de ser de la gente navarra. La gente flipó con él porque tenía una visión muy particular de las cosas y su intervención fue graciosísima.

Aunque se le conoce por su labor en televisión, sus orígenes están en el teatro y también ha trabajado en cine.

Así es, y es probable que muy pronto se me vuelva a ver por el teatro. A finales de este año o principios de 2015 me decidiré por alguna representación que me han ofrecido otros compañeros de profesión. Hay dos opciones y las dos son muy bonitas. Tengo mono, muchísimas ganas de volver. Y en cine, a ver si me llaman para la segunda parte de Ocho apellidos vascos.

¿Qué le parece el fenómeno que ha desatado la película?

La verdad es que es increíble. Nadie lo esperaba. Pero yo me alegro mucho. Tiene buen guión y se ha convertido en la película más taquillera de la historia de España por algo. Insisto en que, personalmente, me alegro mucho de que haya tenido tanto tirón.