Cuando las personas nos enfrentamos a conflictos, respondemos de una forma que es compendio de muchas cosas, las circunstancias, el carácter, el momento en que se produce, la gravedad del caso, etc.. . Como en la vida humana no son raros los conflictos, la repetición de una respuesta en los mismos o parecidos términos, va creando una rutina, una especie de esquema de funcionamiento. Es algo normal, y util, porque automatiza nuestra forma de reaccionar ante sucesos que nos perturban y no podemos estar constantemente pensando formas distintas de resolver esos problemas.
Sin embargo, la respuesta producida por los esquemas puede ser desde el principio, o a partir de un momento, gravemente disfuncional. Como es el caso del discurso político que divide nuestra sociedad. Y cuando nuestra respuesta no solo no resuelve el problema, sino que lo encona, las personas inteligentes, entienden que ha ha llegado la hora de revisarlo.
Las próximas elecciones en Navarra y el resto de España, los partidos políticos van a pretender hacernos elegir entre la oferta que gira, como algo fundamental, sobre identidades colectivas:o la del nacionalismo vasco (sea en su versión soberanista o independentista) o el foralismo planteado como "la defensa de Navarra".
Hagamos un ejercicio mental: piense Ud en cual de las dos identidades son su referente. Bien: ahora voy a adivinar: Seguro que se considera Ud un "navarro auténtico". ¿He acertado? ¡Claro que sí! Ambos son navarros "·de verdad". Así que dejémonos de tonterías identitarias, que no sirven para nada, y centrémonos en los problemas prácticos tenemos que ambos tenemos que resolver: una navarra donde sea agradable vivir, tener hijos, ahorrar, emprender...
Pese al esfuerzo que desplegarán los dos "bandos" en esta campaña electoral lo que peligra en estos momentos no es una "identidad" colectiva, sea Navarra, vasca, o española. Lo que peligra es nuestro bienestar, y los derechos y libertades que paso a paso, acertando y equivocándonos, hemos ido ideando, y consolidando
Nuestra sociedad, independientemente del color que tengan sus sentimientos mayoritarios, que tenga se enfrentará a los mismos problemas: fuertes cambios económicos y medioambientales, instituciones jurídicas debilitadas por la corrupción, captadas por los partidos, movimientos populistas con claras apetencias totalitarias, flujos migratorios masivos que parecen amenazar nuestro bienestar. Un entorno internacional inestable, falta de un proyecto europeo capaz de proponer soluciones alternativas, hacia fuera y de aglutinar esfuerzos en pos de una más efectiva cooperación entre los estados que forman la unión europea. Y lo mismo cabe decir en lo local.
Nopodremos enfrentar estos graves problemas sin tener un plan común: a dónde queremos ir, qué queremos conseguir, y cómo tenemos que hacerlo. Esto es la política. Así de abierta. Con todas esas posibilidades.
Ahora que ya lo sabemos, vamos a centrarnos en un duro trabajo de desbastar nuestras aristas sentimentales, nuetra dura historia reciente, y continuar escribiendo, entre todos, el libro de nuestra navarra querida, y hacer del breve capítulo que hoy nos toca escribir a Ud y a mí, un relato ameno, bonito, con final feliz.
Diego Paños Olaiz
C's
