Si estás en pleno proceso de encontrar tu vestido de novia perfecto, no debes ahogarte en un vaso de agua ni pensar que la tarea es toda una odisea. He aquí algunos consejos que harán que la búsqueda sea más fácil.
Buscar el vestido de novia es uno de los momentos que esperas con más ilusión. A veces, las personas que son más indecisas pueden pasarlo mal a la hora de decantarse por una de las muchas opciones que barajan.
‘Personal shopper’
Un buen consejo es invertir en una asesora de imagen o ‘personal shopper’. Aunque a primera vista pueda parecerte un lujo, será una gran ayuda para encontrar fácilmente el vestido que más te favorezca. Existen profesionales que, con una sola sesión, pueden marcar las pautas de la búsqueda de manera muy clara y ser de gran ayuda.
Las acompañantes justas
Demasiadas opiniones pueden confundirte, por eso lo ideal es que vayas sólo con dos o tres personas de tu máxima confianza, que realmente te darán su opinión real, y que tendrán la suficiente confianza como para decirte que ese vestido que tanto te gusta no te sienta nada bien si es que ese es el caso.
No hay que olvidarse de la comodidad
Normalmente la mayoría de vestidos de novia son preciosos, así que es normal que te veas guapa con todos ellos. Por eso, cuando te pruebes uno no sólo debes pensar si estás guapa, sino también si te sientes cómoda con él.
Muchas veces, la novia olvida, a la hora de probarse un vestido, que debe caminar con él hacia el altar y llevarlo durante muchas horas a lo largo de un día que es mágico pero también agotador.
La sonrisa
Se dice que una novia sabe cuál es su vestido ideal cuando se le escapa una sonrisa al probárselo y se le ilumina la cara. Ese vestido que no quieres quitarte por nada del mundo y que hace que incluso sientas un escalofrío, ese, y no los demás, es tu vestido.
