Inocenta Coloma, una abuela de familia numerosa

08/jul./15 - 14:06

Llena de vitalidad y arropada por su familia, Inocenta Coloma recibía con una amplía sonrisa el comunicado público de que este año sería la abuela de Tudela. Un homenaje que le hace mucha ilusión tanto a ella como al resto de su familia porque, como reconoce, “ahora es más difícil que nos juntemos todos, así que el hecho de que vayamos a estar todos lo hace más especial aún”.

Como cada año, el homenaje correrá a cargo de la Peña Moskera y se celebrará el próximo día 27 a las 12h. Un evento que lleva desarrollándose desde hace 36 años y que antes lo realizaba la peña San Juan. Al extinguirse esta, desde el 97 es la peña Moskera quien sigue realizando con el mismo cariño un homenaje que incluye una placa, una tarta de Santa Ana confeccionada por la pastelería Aguado y el cariño de toda la ciudad de Tudela.

Inocenta Coloma nació en el año 1933 en la ciudad riojana de Cabretón. Allí conoció a su marido, Segismundo Sesma, también de Cabretón y tuvo a Pablo, el mayor de sus cinco hijos.

Teniendo Pablo unos pocos meses de vida, la familia se trasladó en 1959 al barrio de Lourdes de la capital ribera en busca de mejores oportunidades laborales. Aquí nacieron el resto de sus hijos: Mª Pilar, José Miguel, Fernando y Tita, y ahí ha estado siempre dedicandose a ellos y a las labores del hogar.

Han pasado ya 12 años desde que falleciera su marido, pero Inocenta siempre ha estado arropada por su familia. De hecho, a excepción de Pablo que vive en Murchante, todos viven en Tudela y dos de ellos, a escasos metros de la puerta de su casa. Las frecuentes visitas de sus 9 nietos animan más si cabe una casa repleta de colores y agradables olores que emanan de las flores que cuida con tanto cariño y esmero. Sin olvidar a su querido Kiko, un gato que lleva ya 18 años haciendo compañía en la casa.

Los días los pasa nadando, una de sus grandes aficiones. Después de la piscina, las cartas van pasando por sus manos, las de sus amigas y vecinas, para intentar ganar al tradicional guiñote. El despiste, los seises o el cinquillo también forman parte del selecto grupo de juegos que practican estas mujeres tan animadas.

También le gusta la cocina tradicional, aunque viendo la cara que ponen sus hijos y nietos al hablar del tema es difícil adivinar de saber a quién le gusta más que ella cocine. Enseguida una de sus nietas recuerda “¡lo buenas que están las migas de la abuela!”. También es una experta en menestras y su hija Tita reconoce orgullosa que “nos ha dado criado muy bien”, a lo que su hermano Fernando apostilla entre risas, “ya se puede constatar que estamos de buen ver”.

A Coloma le gusta disfrutar de estos días de fiestas. “Me encanta la procesión de Santa Ana y disfrutar con los chiquillos de los cabezudos”. Ahora ya no tiene que estar pendiente de que acabe la música para que vuelvan sus hijos a casa o despreocuparse de comprar cada mañana el pan, pero Inocenta no ha perdido las ganas de disfrutar de estas fiestas tan especiales.

Las abuelas de Tudela

1980 Lucía Pérez y Concepción Calonge

1981 Lucía Pérez y María Arceiz

1982 Ángela Martínez

1984 Mercedes Lacarra

1985 Juana Arrendó

1986 Quintina Escalada

1987 Emiliana Yagüe

1989 Lucía Iturre

1991 Marcelina Buñuel

1992 Vicenta Greño

1993 Eduvigis Arroyo