Fréscano, en la provincia de Zaragoza, es una pequeña localidad agrícola y ganadera que atesora un importante patrimonio histórico y cultural. En los últimos años ha desarrollado el Parque Arqueológico en su término municipal, incorporando cinco Bienes de Interés Cultural (cinco yacimientos arqueológicos de la 1ª Edad del Hierro y la ermita románica de Nª Sª de la Huerta, con sus pinturas góticas). También cuenta con cinco Monumentos de Interés Local: la Iglesia Parroquial del Pilar, el Palacio de los Duques de Villahermosa, el Acueducto, la Casa de elevación de Aguas de Agon y Bisimbre y la Casa de Elevación de aguas de Fréscano, transformada en Museo industrial del agua elevada.
Las visitas al Parque arqueológico se desarrollan en dos espacios diferenciados: por una parte el Museo-Centro de Interpretación con su sala de exposiciones y de audiovisual que está ubicado en recientemente restaurado Palacio de los Duques de Villahermosa. Por otro lado ,el Arqueódromo de Burrén, donde tienen lugar los diferentes talleres, de Recreación de una Cabaña de la Edad del Hierro, tiro con arco, sendero botánico, sendero de rastros de fauna y flora, taller de arqueología y espacio funerario, Ágora y espacio de naturaleza.
La visita al municipio permitirá disfrutar de un paisaje natural cuidadosamente antropizado desde la prehistoria. Todos los años se realizan rutas senderistas que aprovechan las cañadas que lo atraviesan y el sendero natural que asciende hasta el mirador de Burrén. Desde este impresionante mirador en agosto se realiza una marcha nocturna y el visionado de estrellas la noche de San Lorenzo, para ver sus lágrimas.
Un tesoro desconocido para la mayor parte de los visitantes es la Ermita de Nª Sª de la Huerta. Destaca por sus pinturas góticas primitivas recientemente restauradas, que muestran un interesante recorrido iconográfico.
