Hoy en día nadie pone en duda la importancia de manejar el inglés como segundo o tercer idioma, independientemente del ámbito profesional donde te desenvuelvas. Sin embargo, según estudios de medición del Centro de Investigaciones Sociológicas, solo el 25 % de los trabajadores españoles lo hablan y, entre ellos, solo uno de cada cuatro lo habla sin mayores dificultades.
Aunque estos números son bajos, hay un sector profesional, sobre todo nutrido por jóvenes, que están desarrollando sus ideas con modelos de negocio que les permiten rentabilizarlas. Se trata de los emprendedores, aquellos visionarios con el valor de crear su propio negocio y trabajar constantemente por expandirlo. Y aunque no todos son nativos bilingües, sí han puesto a los profesores particulares para clases de inglés en alza, pues la globalización está cada vez más acelerada y el inglés permite derribar barreras idiomáticas que te impidan crecer.
Esto es palpable en las grandes ciudades españolas como Barcelona y Madrid, donde es posible vivir y desarrollar tus negocios sin hablar perfectamente el español. La llegada de internet ha impulsado al inglés como el idioma universal: es el idioma al que más libros se traduce y en el que más se interpreta. También hay quienes afirman que internet habla inglés y la mayor parte de los contenidos generados para emprendedores y empresarios se hace en este idioma.
¿Qué ventajas le trae a mi compañía?
Es posible que una empresa funcione perfectamente sin que su equipo ni sus líderes hablen en inglés, pero esto cambia cuando perciben las ventajas del escenario contrario. Contar con un equipo bilingüe aumenta tu capacidad de proyección más allá de tus fronteras, hace a tu empresa mucho más competitiva, aumenta la productividad y permite trasmitir tu mensaje sin intermediarios. Si antes el inglés era el idioma del futuro, ahora es el idioma universal.
El 61% de los directivos saben que capacitar a su equipo con un segundo idioma permite el desarrollo laboral, aunque también es cierto que hay que saber hacerlo de manera que los trabajadores se sientan motivados a hacerlo porque entienden que les va a permitir a ellos mismos formarse para hacer un mejor trabajo. La combinación de expresión y comprensión oral es un fundamental para un aprendizaje óptimo, así que estimular la creación de clubes de conversación puede resultar beneficioso para que se sientan en confianza de poner en práctica sus conocimientos.
Este es sin duda el mejor momento para invertir en tu propia formación idiomática, pues parece ser un requisito importante para mantenerse al día en un mercado tan competitivo como el de los negocios.
