Tudela

Otro curso en Segunda B

Tudelano-Conquense-Principal.jpg

El choque de este domingo estaba marcado en rojo. Era la oportunidad para sellar de forma definitiva el quedarse en Segunda B, un objetivo cuyo único obstáculo podía llegar de un hipotético y jamás deseado puesto de promoción de permanencia. El Tudelano ha tenido la suerte de su lado y, merced la derrota del Atlético de Madrid B en el partido del mediodía, comenzaba el duelo frente al Conquense sabiéndose salvado. Como después reconocería 'Manix' Mandiola en rueda de prensa, el saltar al campo con el objetivo cumplido restaría algo de tensión a los blanquillos en su despedida como locales en la presente campaña.

Pese a ello, la grada presentaba una entrada nada desdeñable y la charanga y los gaiteros se había unido a la masa del Ciudad de Tudela, creando un ambiente de fiesta en la zona de la grada general. Los futbolistas locales se contagiaron en parte  de ese empuje gestado en los prolegómenos y trataron de devolver a la afición los ánimos con un triunfo que buscaron con más imprecisiones de las debidas. Con un Conquense que entró al verde decidido a mandar con el balón, el conjunto de Tudela trató de aprovechar los espacios y de maximizar sus opciones de contraataque.

Fruto de esa insistencia, y de la pelea constante de unos enchufados Borja Herrera y Álex Sánchez, llegarían los acercamientos más peligrosos. A los veinte minutos, una jugada con numerosos rechaces y 'huys' acabó con un cabezazo manso de Esparza que a punto estuvo de colarse por la escuadra derecha del arco visitante. Aunque el equipo de Mandiola llegó con relativa facilidad a la línea de tres cuartos, poco más pudo avanzar en su búsqueda del gol. Los visitantes, en la misma tónica, apenas inquietaron a Miguel Asín, titular en lugar del habitual Zaparaín. El arquero de Peralta solventó con tablas una mala salida y un posterior intento de vaselina que quedó en agua de borrajas. Esa fue la mejor para el Conquense.

La segunda mitad no mejoró el panorama y, lo que fue peor, incluso lo hizo más tedioso. El fútbol, muy trabado y desarrollado entre pugnas interminables y juego demasiado horizontal por parte de ambos conjuntos, dejó paso a momentos que quedarán en la memoria de la grada tudelana. El primero, la sustitución de Esparza, quien, aplaudiendo sin cesar a modo de agradecimiento, escenificó su despedida en casa como jugador del Tudelano, ya que, con toda seguridad, colgará las botas tras una trayectoria longeva y en la que precisamente el conjunto blanquillo ha sido el club en el que más temporadas ha permanecido.

Por otro lado, el Ciudad de Tudela tuvo la ocasión de ver los primeros -muy posiblemente únicos- minutos de los cedidos por Osasuna Rodrigo Sanz y Sergio Castel. Fue el extremo de Olite quien más lo intentó por la derecha, aunque lo hizo con ansiedad, de forma precipitada y evidenciando una falta de entendimiento con sus compañeros y de adaptación al sistema propia de su situación. Al igual que ocurrió con Castel, quedó patente que ser inédito no ayuda a lucirse en media hora de juego.

El choque no deparó mucho más y, con el pitido final, la afición congregada en el Ciudad de Tudela despidió a los suyos con un aplauso de felicitación y agradecimiento por haber logrado la salvación a tiempo. Mandiola fue también coreado en un par de ocasiones, quedando reflejado que el técnico irundarra es una de las razones por las que el rumbo de un barco que en diciembre viraba peligrosamente a la deriva fue retomado con maestría y, por tercera temporada consecutiva, volverá a campear por los estadios de la categoría de bronce del fútbol nacional.

Ficha técnica

TUDELANO: Asín; Delgado, Nandi, Lalaguna, Marcos Martín; Aziplicueta (Pérez Rubio, m.61), Reche; Esparza (Rodrigo, m.51), Víctor Bravo, Borja Herrera (Castel, m.66).

CONQUENSE: Lara; Sendoa, Rangel, Francisco, Manzano; Borja, Tajamanta (Tomero, m.54); Egea, José Vega, Jorge (Daniel, m.76); y Alfonso (Saiz, m.54).

ÁRBITRO: Navarro Collados, asistido por Martínez y Luna. Amonestó por el Tudelano a Lalaguna y Marcos Martín. Por el Conquense, mostró amarilla a Saiz.

INCIDENCIAS: Unos 800 espectadores en el Ciudad de Tudela. Se guardó un minuto de silencio en memoria de José Luis Resa.