El grupo de niños perteneciente a la escuela San Julián del Club Ribera Navarra cuyos padres denunciaron la falta de instalaciones municipales para que los pequeños pudieran proseguir con sus entrenamientos, a fecha de ayer seguían sin poder entrenar y sin respuesta por parte del Ayuntamiento.
Ante tal situación, el grupo de los padres de estos niños han decidido, en señal de protesta, acudir cada miércoles por la tarde al polideportivo municipal Elola, con sus hijos, para que jueguen allí. También están recogiendo firmas.
Una de las madres afectadas señaló a este semanario que esta movilización se lleva a cabo a título personal de los progenitores. “Seguimos esperando a que nos den una respuesta; los niños no entienden por qué no pueden entrenar, mientras otros compañeros de otros clubes lo hacen y en instalaciones municipales”, indicó esta madre.
Por su parte, el club Ribera Navarra señala en una nota de prensa que hace dos semanas se reunió con el alcalde, “quien nos dijo que a lo largo de la semana anterior se nos asignarían instalaciones, dado que lógicamente había un número importante de niños que habían elegido nuestra escuela”.
