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“Lo visto en Santurtzi no se puede explicar sino se ve”, comentan los responsables del club tudelano. Y es que, después de conseguir un favorable 1 a 3 al descanso, desplegando su juego habitual, los riberos regresaron al campo “sin ambición, dando por definitivo el resultado del primer tiempo, sin lucha, ni ganas”, comentan. De hecho el Torre Monreal encajó un contundente 5 a 0 en la segunda mitad. “Esto debe servir de reflexión, porque no hay equipo para perder de estas maneras”, reconocen.
Las reivindicaciones de los padres de los niños integrantes de la escuela de fútbol sala San Julián ya han dado sus frutos. El viernes conocieron la noticia de que los jóvenes futbolistas ya podían empezar a entrenar. Lo harán, los lunes y los miércoles en el Elola y en San Julián. Por ello han querido agradecer el trabajo de todas las partes implicadas, los propios padres, el club Ribera Navarra y el Ayuntamiento, para resolver el problema.
