La continuación de la tradicional ‘Semana de la Espiritualidad’ que Juan Anuncibay ha organizado desde hace siete años junto con Castel Ruiz ha tomado una nueva forma. Este pasado fin de semana se celebraron las primeras Jornadas de Psicología Transpersonal y Espiritualidad, donde diferentes expertos se han dado cita para debatir y dialogar sobre política y espiritualidad; ¿es posible una política espiritual hoy en día?, ¿qué entendemos por esto? Desde la óptica de la psicología transpersonal, una política espiritual sería aquella llevada a cabo tanto por políticos como por ciudadanos, que viven y actúan desde una consciencia unitaria, donde su identidad personal se experimenta como trans-personal, es decir cuando el individuo deja de sentirse como un ser individual y separado de otros seres, en la ejecución de sus acciones.
Tal y como se interpretó en estas jornadas inauguradas por el famoso politólogo de la UAM, Carlos Taibo; una política de este tipo tendría en cuenta a todos y a todo por igual. De esta forma, el mismo amor, cuidado y atención que una persona se atribuye a sí misma, proporcionaría a todo lo que le rodea, porque sentiría que ella misma es todo y todos a la vez.
Para llegar a este tipo de política -acordaron los diferentes ponentes- sería necesario que primero se diese un profundo cambio personal que implicase un nuevo estadio de consciencia expandida. No obstante esto es harto difícil en una sociedad que incentiva el egocentrismo, el bien material, lo rápido y fácil, el interés propio, la comodidad y en definitiva, la acción sin consciencia.
Izaro Gorostidi, profesora de Ciencias Políticas de la Universidad del País Vasco, concluyó que nuestros políticos son el reflejo de la sociedad que representan, por tanto si queremos una política diferente, primero habremos de mirar hacia dentro y producir en nosotros mismos el cambio que queremos ver en los demás. O como lo expresó Mahatma Gandhi: “Sé el cambio que quieres ver en el mundo”.
Estas jornadas han significado un espacio de reunión y reflexión para decenas de personas interesadas por la evolución hacia una humanidad más fraternal, donde el único y verdadero interés es el bien común. Algo que puede ser llevado a cabo desde cualquier posición que ocupemos en la sociedad, puesto que todos estamos interrelacionados y lo que uno es, repercute en todo lo demás. Es por eso que se vuelve crucial el trabajo interior, para encontrarnos con la esencia que en realidad somos, y que compartimos con el mundo según remarcó el pionero de la psicología transpersonal en España, Manuel Almendro.
Tras la buena recepción y éxito que estas primeras jornadas han tenido, se prevén las siguientes en marzo de 2016, donde se tratará el tema de la salud psicológica y su vinculación con la espiritualidad.
Este evento ha sido posible gracias al Ayuntamiento de Tudela, la Asociación Transpersonal Iberoamericana y la colaboración desinteresada de numerosas personas que han participado de diferente forma, en especial gracias a los Jesuitas, quienes prestaron el Salón de Actos de su colegio en el que tuvo lugar.
Desde aquí se les quiere expresar nuestro más sincero agradecimiento tanto a ellos, como a todos los asistentes que mostraron su interés por la co-creación de un mundo mejor.
Román Gonzalvo
Organizador de las jornadas
