Ocurrió contra el Amorebieta y volvió a pasar frente al Leioa. Otro equipo vizcaíno ha evindenciado la peligrosa y preocupante tendencia que tienen los rivales que visitan el Ciudad de Tudela de llevarse mucho premio sin apenas mostrar credenciales para lograrlo. El Tudelano ha perdido por la mínima ante el conjunto vasco (0-1), un equipo ramplón en su versión de visitante y que sólo ha tirado dos veces a puerta en los noventa minutos. Todo habría cambiado si los blanquillos, al menos, hubiesen tenido alguna idea fresca en ataque, sobre todo en una segunda parte para olvidar. Con un equipo perfectamente batible enfrente, el equipo ribero se ha hecho un auténtico 'harakiri'.
Desde el inicio se vio que al equipo de Mandiola, que vio el partido desde la grada debido a su sanción, iba a notar muchísimo la ausencia de su referencia en ataque, Álex Sánchez, con una rotura en su abductor derecho. Lucho ocupó su lugar como único punta y ofreció brega y trabajo, aunque sin resultados ni la verticalidad de su paisano lesionado. No obstante, la iniciativa era local desde el principio y los acercamientos por banda derecha, gracias a la buena conexión de Julen Goñi y Bravo, se multiplicaron. Los centros, pese a su cantidad, no encontraban rematador.
Al Leioa le dio tiempo a asustar a Pagola con un contraataque bien llevado en el ecuador de la primera mitad. Yurrebaso se plantó solo ante el portero del Tudelano, que despejó su intentona. Sólo unos minutos después, Lucho tenía la mejor ocasión del encuentro para los locales. Con un disparo fuerte de zurda a bocajarro, vio cómo el esférico lo despejaba Iturrioz. El meta del Leioa estuvo muy seguro durante todo el choque y eso dio alas a sus compañeros.
Con esas dos oportunidades reseñables y la infructuosa puesta en marcha de la estrategia a balón parado por parte de Tudelano terminó la primera mitad. Los segundos 45 minutos podía ser un punto de inflexón para los de casa, a los que sólo les faltaba dar con la tecla en tres cuartos de campo. Su engranaje, sin embargo, se iría oxidando progresivamente sin remedio. Tal fue así que el único hombre capaz de desequilibrar la balanza parecía David Martín. El extremo cedido por el Numancia se soltó por momentos y protagonizó las mejores internadas del Tudelano hacia el área vizcaína.
Una de esas jugadas por banda, en la que se fue por velocidad y ganó la línea de fondo metiéndose hasta la cocina, acabó en un pase de la muerte que era no medio, sino tres cuartos de gol. Lucho sólo tenía que empujarla, pero le golpeó mordida y el balón se desvió incluso se la trayectoria de gol. Los minutos pasaban irrefrenables y la ansiedad se empezó a notar en las piernas de los futbolistas blanquillos. En esas, entró al campo Ander Vitoria, un hombre de ataque para dar chispa a un Leioa insulso. Dicho y hecho. El primer balón que tocó, tras saque de una falta, acabó en gol para los visitantes. Un jarro de agua fría.
Quedaban más de veinte minutos. Pero ni las faltas, ni las diagonales de Goñi y Martín hacián efecto. Gorka Luariz fjó algo más a los centrales, pero su esfuerzo sólo tuvo beneficios en el juego de espaldas. El Tudelano, que vio como David Martín se marchaba lesionado por un golpe en el gemelo, no volvería siquiera a probar con peligro a Iturrioz. Malas sensaciones para un equipo que se asoma a la zona peligrosa de la tabla y no acaba de lograr continuidad como local.
Ficha técnica
TUDELANO: Pagola; Delgado, Jonathan, Mario (Azpilicueta, m.71), Morgado; Reche, Lázaro, Julen Goñi (Luariz, m.71), Víctor Bravo, David Martín (Lumbreras, m.82); y Lucho.
LEIOA: Iturrioz; Garmendia, Córdoba, Oier, Simón; Alaña (Polanco, m.57), Julio; Paredes, Reguero, Sergio García (Larrucea, m.79); y Yurrebaso (Vitoria, m.68).
ÁRBITRO: Álvarez Fernández, asistido por Larhlid y Gómez García. Amonestó por el Leioa a Córdoba, Alaña y Simón. Por el Tudelano, a Mario y Lázaro.
GOL: 0-1, m.69: Vitoria
INCIDENCIAS: Unos 600 espectadores en el Ciudad de Tudela.
