La premisa es clara. Ahora mismo e incluso alargando un poco la mirada a un corto-medio plazo, el Ayuntamiento de Tudela no tiene la capacidad presupuestaria de hacer frente a la construcción de un nuevo polideportivo con 2.000 espectadores de aforo. Esa cantidad de asientos es una de las premisas que pone la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) sobre la mesa como exigencia para que el Aspil-Vidal Ribera Navarra FS siga compitiendo en la máxima categoría nacional de este deporte. La conclusión en ese enunciado lógico confluye en la unión de consistorio y club. A finales de este mes, mantendrán una reunión con la liga en la que trasladarán hasta dónde pueden llegar con los requisitos de la moratoria.
El alcalde Eneko Larrarte quiso trasladar esta situación este sábado 19, coincidiendo con el partido del Aspil-Vidal en casa ante Jaén Paraíso Interior. El primer edil lo hizo acompañado del presidente del club, José Luis Ruiz, primero ante las peñas de aficionados y después ante los medios. “Para la inversión referida al aumento del aforo, hoy en día el Ayuntamiento tiene unas limitaciones técnicas y unos condicionantes de regulación estatal y de límites de regla de gasto que lo dificultan”, señaló tajantemente Larrarte.
La reunión
Así, el objetivo de la reunión de finales de mes con la Liga será mostrar a los responsables de la competición, sobre el terreno, “hasta dónde puede llegar el consistorio y hasta dónde no”. No obstante, el alcalde dejó una puerta entrebierta al referirse al contexto actual que imposibilita la citada actuación municipal. “Si ese contexto cambiase, si encontráramos recursos de otro lugar, podríamos encontrar una solución a ese condicionante”, dijo.
"Vamos a ir a la reunión con la LNFS con los pies en el suelo; sea cual sea la decisión que tomen finalmente, eso no supondrá la desaparición del Ribera Navarra FS"
José Luis Ruiz
Presidente del Ribera Navarra FS
Concretamente, Larrarte aludió directamente al Gobierno de Navarra señalándolo como un actor “importante” en este reto. “Somos conscientes de que ahora mismo no hay una línea de subvenciones para reformar instalaciones deportivas más allá de las de titularidad propia del ejecutivo foral. Nosotros vamos a trabajar para que eso cambie y, al igual que iremos de la mano del club, intentaremos que ellos también vayan de la mano con nosotros dos”, expresó el primer edil.
La segunda moratoria
Cuestionado por la realidad latente de que ésta es ya la segunda moratoria de la LNFS con el club tudelano, Larrarte fue tajante. “Somos conscientes de ello, pero también de que la propia LNFS es la que se autorregula y, por tanto, la que tiene la competencia de decidir sobre las moratorias y los plazos para cumplirlas”, señaló. “No debo ponerme en el lugar ni en la cabeza de ningún responsable de la LNFS, pero tengo claro que si yo fuera uno de ellos no me gustaría perder para la Liga a este club ni a esta afición”, sentenció.
"No debo ni puedo ponerme en la cabeza de un dirigente de la LNFS pero, si yo fuera él, no me gustaría perder ni a este club ni a esta afición para mi liga"
Eneko Larrarte
Alcalde de Tudela
El presidente del club, José Luis Ruiz, rerendó esta misma idea. “Yo he estado en otros pabellones de España y tener esto es un privilegio”, dijo. “Vamos a reunirnos con la Liga teniendo los pies en el suelo pero una cosa quiero dejar clara a los responsables de la competición: y es que, sea cual sea su decisión acerca de las instalaciones, no va a suponer la desaparición del Ribera Navarra FS”, expresó el máximo mandatario del club ribero.
